Tegucigalpa, Honduras.- Las amenazas de protestas y suspensión del servicio de transporte fueron repetitivas en los últimos meses. Eran las medidas extremas a las que llegaría el rubro del transporte urbano, ante la falta de pago del bono compensatorio del gobierno.
La situación solo podía terminar en dos cosas: una parálisis del servicio de transporte o un alza de tres lempiras al precio del pasaje. Ambas, afectaciones directas para la población.
La noche del martes 12 de agosto, el Congreso Nacional (CN) aprobó el presupuesto que garantiza el pago de subsidios hasta el mes de noviembre para el rubro.
“Para proteger el bolsillo de miles de familias hondureñas, el Congreso Nacional aprobó una ampliación de la Compensación Económica Provisional del Pasaje, asegurando que durante este año no se incrementen las tarifas del transporte público urbano”, celebró el Congreso Nacional a través de un comunicado.
El pago funciona como un alivio económico para miles de usuarios, ya que les permite pagar un menor valor del pasaje de lo que corresponde. Según los transportistas, la tarifa real es de 16 lempiras, pero con el bono de gobierno se ha mantenido en 13 lempiras.
“Con esta medida, el Estado entregará a los concesionarios tres lempiras por cada pasajero transportado, se pagará hasta un máximo de L1,080 por cada unidad y día trabajado, se les reconocerá hasta 26 días al mes”, explicó el CN.
Además, agregó que el presupuesto aprobado saldará la deuda de los cinco meses que no se han pagado este año y garantiza el pago hasta el 30 de noviembre, día de las elecciones generales.
Los transportistas informaron anteriormente que el gobierno les adeudaba más de 200 millones de lempiras, ya que solo había cumplico con el bono hasta febrero de 2025.
El presupuesto aprobado supera los 574 millones de lempiras. Según el CN, será el Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT) quien se encargue de la distribución y supervisión de pagos.
“El IHTT implementará mecanismos de control y tecnología para que la compensación sea transparente y se traduzca en un servicio más eficiente para todos”, determinó el CN.
A cambio del pago, los transportistas deben cumpliar algunos requerimientos: mantener el servicio sin interrupciones, mejorar la atención y seguridad de los pasajeros, modernizar unidades y terminales y no realizar paros que afectan a la población.