Tegucigalpa, Honduras.- Con decenas de peluches como símbolo de inocencia, más de 50 organizaciones se concentraron este miércoles, Día del Niño, frente al Congreso Nacional en el denominado “plantón de peluches”, una protesta pacífica que busca llamar la atención sobre las múltiples vulneraciones que enfrenta la niñez hondureña.
Agresiones físicas, violencia sexual, embarazos adolescentes, limitado acceso a la salud y falta de educación son algunas de las problemáticas señaladas por las instituciones participantes.
De acuerdo con la Secretaría de Estado en los Despachos de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), en lo que va de 2025 más de 2,500 niñas y niños han sido víctimas de violaciones a sus derechos.
El evento fue organizado por la Coordinadora de Instituciones Privadas Pro Niñas, Niños, Adolescentes Jóvenes y sus Derechos (Coiproden), junto con redes y colectivos que trabajan en la defensa de la niñez.
La diferencia de este evento fue que, en lugar de personas reales, el plantón fue realizado por peluches con carteles que exponían los reclamos de los hondureños más pequeños.
“Mis derechos no pueden esperar más”, “merezco crecer con esperanza, no con miedo”, mi cuerpo merece respeto, nadie debe tocarme sin mi permiso”, “no debo trabajar, quiero aprender y jugar”, “mi futuro depende de lo que hagan hoy por mi”, eran algunas de las solicitudes en el plantón.
Erick Romero, director nacional de Aldeas Infantiles SOS, dijo que “le pedimos apoyo a los peluches de nuestros niños y niñas, que son los que guardan los secretos de la vulneración de derechos de los niños, para que fueran ellos quienes contarán en voz viva, cuáles son las situaciones a las que se enfrentan”.
El director lamentó que “la agenda de la niñez ha sido ancestralmente olvidada en el país, por lo cual tenemos brechas profundas de atención"
"Por ejemplo, en caso de vulneración de derechos por agresión física, violencia sexual, abuso sexual, hay grandes retos que tenemos que ir construyendo”, agregó.
Entre las carencias que más denuncias reciben están: el trabajo infantil, abuso sexual, muertes violentas y migración forzada; no obstante, hay un gran listado de deficiencias que se mantienen a la espera de ser vistas por las autoridades del país.
Romero destacó que “fue grato ver como algunos diputados se acercaron y leyeron lo que decían los rótulos de los peluches”.
No obstante, aseguró que “otros pasaron de largo, siendo el reflejo de nuestro Congreso Nacional; algunos han sido vulneradores de derechos y otros que en un género de interés se acercan e intentan conocer más, platicar, informarse para así hacer una toma de decisión informada, más allá de que si ganan votos a favor o en contra”.
Las autoridades de Coiproden aseguraron que “la indiferencia frente a la niñez es también una forma de violencia”, por lo que se solicitó a las autoridades agregar a sus agendas de temas las necesidades y los derechos de este sector de la población.
