Un grupo de pobladores realizó este lunes un plantón frente al edificio de la alcaldía de Morocelí para protestar contra la construcción de una granja penal en ese municipio del oriente de Honduras.
Según los protestantes, la construcción de ese presidio traerá inseguridad a la zona, por lo que exigen que la cárcel sea construida en otro lugar. Además, aducen que no se tomó en cuenta su opinión para dicho proyecto.
Uno de los manifestantes, que omitió su nombre, dijo que 'la población está atemorizada porque no sabemos qué clase de privados de libertad son los que van a traer aquí'.
Los habitantes de Morocelí aseguraron que las medidas de presión continuarán hasta que sus voces sean escuchadas por las máximas autoridades hondureñas.
La cárcel de Morocelí cumplirá con los estándares de seguridad y derechos humanos, han asegurado las autoridades gubernamentales.
Cada celda albergará a dos reos y no como en el resto de reclusorios, donde hay hasta 100 ó 200 privados de libertad.
En total, son dos centros penales los que están en construcción en la actualidad, el otro está ubicado en Santa Bárbara, al occidente de Honduras. Ambos tienen un costo de 20 millones de lempiras que son financiados por la banca privada.
Entre los dos penales se albegarán a unos 1,500 reos custodiados por unos 250 policías penitenciarios.
