Sucesos

Honduras: 250 miembros de la diversidad sexual fueron asesinados en nueve años

Las distintas asociaciones de la comunidad LGTBI de Honduras reclaman mayor protección por parte del Estado por ser un sector vulnerable ante el resto de la sociedad debido a la discriminación de género que sufren

05.04.2017

Tegucigalpa, Honduras
A pocas horas del asesinato de un miembro de la comunidad Lésbico, Gay, Transgénero, Bisexual e Intersexual (LGTBI), las investigaciones han comenzado, pero aún no hay un resultado concreto sobre el esclarecimiento del crimen.

La Secretaría de Seguridad mediante su portavoz Julián Hernández informó que “las muertes de este tipo como la de cualquier persona se están investigando”.

“Lógicamente que hay muertes que de una u otra manera representan un tipo de impacto y para ello hay una unidad especial que investiga estos homicidios”, detalló Hernández.

La unidad encargada de darle seguimiento y solución a la muerte de miembros de la comunidad LGTBI es denominada Fuerza de Tarea de Investigación de Delitos contra la Vida, adscrita a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).

En el 2017

ocho miembros de la diversidad sexual han sido ultimados en el país, según datos.

Desde esa entidad deberían de investigarse tanto el asesinato de Marco Tulio Montoya Sánchez ocurrido hace dos días, así como los otros 29 suscitados desde enero de 2016 hasta la fecha.

Montoya Sánchez apareció ultimado la mañana del martes en la colonia El Carrizal tras haber sido reportado desaparecido el fin de semana.

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La situación sigue igual
Erick Martínez,
defensor de los derechos de la comunidad LGTBI, es del criterio que “los asesinatos en contra de la comunidad LGTBI en el país siguen igual, sin embargo, cualquier otro asesinato es condenable”.

Según Martínez, “la comunidad LGTBI ha venido denunciando este tipo de situaciones de vulnerabilidad que tenemos a nivel de Estado porque no hemos encontrado respuestas efectivas a nuestras solicitudes”.

Los estudios realizados por varias organizaciones de la sociedad civil reflejan que desde 1994 hasta la fecha han muerto en circunstancias violentas 270 personas de la comunidad Lésbico, Gay, Transgénero, Bisexual e Intersexual.

El primer caso de discriminación por razones de orientación sexual fue judicializado en 2013 en Honduras.

Martínez refutó estas cifras argumentando que “desde 1994 el Ministerio Público comenzó el tema de documentación de asesinatos, pero desde esa fecha hasta el año 2008 solo registraron 20 casos, lo cual es demasiado poco”. Esto significa que en los últimos nueve años, 250 personas de la comunidad LGTBI han sido asesinados en el país.

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La organización Human Rights Watch, dedicada a la defensa de los derechos humanos, en ese mismo período de tiempo contabilizó más de 200 asesinatos, aseguró Martínez.

El miembro de los grupos LGTBI, José Zambrano, aseveró que “hay una vulnerabilidad tremenda, hay temor, por que los datos son alarmantes y la forma en que están muriendo nuestras compañeras”, lamentó.

Zambrano criticó que “desde el Estado se está haciendo una labor muy débil y poco aceptable pese a que el país ha adquirido compromisos para proteger a la ciudadanía, no solo LGTBI, sino a toda la población”.

El 96%

de las muertes se encuentran aún en la impunidad por no contar con los medios probatorios.

Los defensores de la diversidad sexual en Honduras coincidieron en que la discriminación hacia estos grupos en pleno siglo XXI persiste a pesar de que hay leyes que los protejan.

De los 270 casos de homicidios registrados en Honduras desde hace 23 años, solamente 42 han sido judicializados, pero no resueltos satisfactoriamente.

Muchos de los casos se han perdido o no han encontrado a los culpables debido a la falta de medios probatorios presentados por el Ministerio Público en los juicios, explican los afectados.

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