Los organizadores del evento aseguran haber reunido a más de 35 mil personas en esta cabecera departamental para ratificar su apoyo a las aspiraciones presidenciales de Ricardo Álvarez.
Un boletín del movimiento Salvemos Honduras informa que Álvarez fue recibido en Gracias, Lempira, con una kilométrica caravana de más de dos mil vehículos.
Durante todo el evento “la interminable fila de carros no paraba de llegar a la plaza que estaba repleta de miles de nacionalistas que con banderas y pancartas le gritaban vivas a su candidato, asegurándole su respaldo para que construya el país de oportunidades que propone”, dice el boletín.
Agrega que “ante más de 35 mil personas Ricardo aseguró que combatirá la pobreza y el abandono en el que han estado sumergidos los habitantes de Lempira en los últimos años, ubicándolos como el departamento más pobre de Honduras”.
El líder de Salvemos Honduras prometió un país de oportunidades para todos, garantizando reglas claras que generen la inversión y den el impulso económico de Honduras para combatir la pobreza y la falta de oportunidades de empleo.
Lamentó que mucha gente está interesada en no acabar con la pobreza de los pueblos porque dejarán de ser sus clientes, ante lo que propuso soñar con un país donde se tenga el derecho a ser distinto y lo único que mande sea el respeto.
“Vengo a darle dignidad a la gente, a poner justicia y eliminar la tristeza, miseria, necesidad y el crimen organizado, yo quiero un país donde las personas sean primero y donde el primer derecho que tengan los pobres sea salir de la pobreza, donde nadie esté de más y donde nadie pueda sentirse ajeno”, manifestó.
Aseguró que con el respaldo del expresidente Ricardo Maduro está elaborando un plan para recuperar la seguridad y las finanzas de la nación y de esta forma impulsar fuentes de trabajo que garanticen desayuno, almuerzo y cena a los hondureños.
“Llegó el momento de que salvemos Honduras del miedo, la inseguridad, la falta de oportunidades para los jóvenes, el desempleo y la falta de libertad, estamos hartos del ‘no hay que está por todos lados, cuando vamos a los hospitales y pedimos medicina, cuando pedimos un empleo, si vamos al banco a pedir un préstamo para trabajar la tierra o para abrir un pequeño negocio”.
