Honduras

Quisieron ocultar la auditoría de los reactivos vencidos en el Hospital Escuela

La directora del centro, Cristina Rodríguez, pidió que el informe se quedara a lo interno

22.01.2019

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Fue una sesión más de trabajo entre algunos miembros del junta directiva del Hospital Escuela Universitario (HEU) y el auditor interno de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Andrés Laínez, en agosto de 2017.

También estuvieron presentes miembros de la unidad de Asesoría Legal del centro asistencial. El tema central de la reunión era la exposición de la auditoría interna que se realizó en el Laboratorio de Inmuno-Histoquímica de Patología, donde se encontraron reactivos vencidos para realizar biopsias y detectar si los pacientes tenían cáncer y tumores.

EL HERALDO reveló en exclusiva el pasado lunes como se perdieron 2.4 millones de lempiras en reactivos vencidos en el Hospital Escuela producto de una sobrecompra. Esa acción se hizo en 2014 mediante una licitación, teniendo insumos aún existencia.

La opinión de la unidad de Asesoría Legal del hospital fue que al menos ocho personas tuvieron responsabilidad. En la auditoría interna se conoció que fueron 162 los reactivos
que caducaron.

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Reunión
En aquella reunión de 2017 entre las autoridades se solicitó que las irregularidades se subsanaran a lo interno y no se diera parte al Tribunal Superior de Cuentas (TSC), violentando el reglamento de la Ley Orgánica del ente contralor del Estado.

EL HERALDO tuvo acceso el martes a un audio de la sesión que fue grabada por uno de los presentes. La reunión duró una hora con 29 minutos. En el audio se escucha al auditor interno de la UNAH exponer a los presentes: “En este hallazgo hay responsabilidad civil y administrativa. Este es un informe que todavía no está hecho para presentarlo al TSC, son ustedes los que van a decidir eso, si esto se eleva al Tribunal o se deja como un informe descriptivo, pero no sé como vamos hacer para poder restituir los reactivos”.

En seguida una auditora intervino para decir que se tenía que notificar la responsabilidad a quienes ocupaban los cargos en ese entonces, aunque ya no lo sean.

La investigación comprende del periodo del 2 de enero de 2012 al 31 de diciembre de 2016.

El auditor indicó: “Si se repone dentro de 10 hábiles la responsabilidad civil desaparece pero no así la responsabilidad administrativa, pero ya es menos”. Explicó que lo que hace el TSC es que aplica una multa que puede ir de 25,000 a un millón de lempiras, dependiendo de la gravedad del caso si se comprueba que hubo negligencia.

Seguidamente la directora del HE interviene en el minuto 31 de la grabación: “Licenciado Laínez, pero esto se puede evitar de que vaya al Tribunal Superior de Cuentas y se pueda subsanar dentro de la institución, ambas responsabilidades, civil
y administrativa”.

Lea: 2.4 millones de lempiras se perdieron en reactivos vencidos en el Hospital Escuela

El auditor responde: “Sí, lo pueden hacer, porqué esto todavía no está en un formato que va a dar al TSC, puede quedar a nivel de un informe y son ustedes de la junta directiva que van a decidir si lo hago en formato de auditoría especial para el TSC o si entre ustedes van a tomar la decisión de que quede a lo interno”. Y en efecto el informe quedó a lo interno porque el TSC confirmó que nunca recibió ese informe.

Seguido de eso, señaló que para dejar el informe a lo interno del HE se debía dejar establecido por escrito porque “si el día de mañana viene el TSC, porque la noticia se haya revelado, y el Tribunal venga acá a corroborar este hecho entonces me van a preguntar a mi y si yo no tengo evidencia, a quién le van halar el aire va a ser a mi por no haber comunicado esta situación”, advirtió Laínez. Él le consultó a Rodríguez que cómo quedan los reactivos y ella contestó que se debe subsanar de alguna manera. Sin embargo, han pasado dos años y la situación no ha sido subsanada.

EL HERALDO buscó una reacción de la galena sobre el particular y respondió: “me reservo el derecho de opinar al respecto. Gracias”. A su vez, se trató de contactar al auditor, pero no respondió las llamadas ni los mensajes.