Tegucigalpa, Honduras.- Tras el fallo de un tribunal de apelaciones en Estados Unidos que pone fin al Estatus de Protección Temporal (TPS) para más de 50,000 hondureños, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) pidió al gobierno establecer mecanismos urgentes de apoyo para los connacionales.
En un comunicado, el Conadeh instó al gobierno, a crear mecanismos que den respuestas oportunas y efectivas para los hondureños que, por más de 25 años, estuvieron amparados en el estatus de protección y que en los próximos días quedarán desprotegidos.
Elsy Reyes, coordinadora de la Defensoría de Movilidad Humana del Conadeh, declaró que las personas amparadas en el TPS quedan sin ninguna protección, ya que no tendrían permiso para trabajar, para obtener licencia de conducir, ni seguro médico.
El fallo genera mucha preocupación e incertidumbre en los compatriotas que desde la década de los noventa obtuvieron el beneficio, por lo que el gobierno, tiene que buscar mecanismos de respuesta para recibirlos, indicó Reyes.
"El gobierno tiene que buscar mecanismos de respuesta para recibir a estos compatriotas que difícilmente se van a poder adaptar a una realidad tan difícil que enfrenta el país en temas de desempleo y de seguridad", dijo.
El próximo lunes 8 de septiembre finaliza el TPS, es decir, que los hondureños amparados tienen unos 18 días, desde que se anunció el fallo este miércoles, para regular su situación migratoria, de los contrario corren el riesgo de ser deportados.
"Es primordial que los connacionales amparados al TPS ajusten su situación migratoria, ya que hay personas que pueden presentar su solicitud para una residencia por vinculo familiar, si sus hijos ya cumplieron la mayoría de edad, eso puede permitir que si hay un proceso pendiente de migración la persona no pueda ser deportada", explicó.
Ante el panorama, Reyes manifestó que hay muchos hondureños que afirman no estar preparados, ni quieren regresar a Honduras, pues llevan muchos años en Estados Unidos, tienen una familia y ya están arraigados en ese país.
"Esa es otra de las preocupaciones que se desprenden de los hondureños en Estados Unidos, una posible ruptura de la unidad familiar, porque la mayoría tienen una familia formada, hijos que posiblemente los va a tener que dejar en ese país", lamentó.
La coordinadora de movilidad humana, aclaró que aún no hay una resolución final por parte de la corte estadounidense al respecto, por lo que en los próximos días, previo a que llegue la fecha de la terminación del programa, podría suceder muchas cosas.
De lo contrario, "si no hay ninguna novedad hasta el 8 de septiembre, estamos ante una posible deportación de nuestros compatriotas, de nuestros hermanos hondureños desde Estados Unidos", dijo.