Ocultar la verdad puede traer muchos problemas a los niños.
Basado en esta realidad cotidiana, el Centro Cultural de España en Tegucigalpa (CCET) presentó la historia 'El barrilete de Paquito'. Se trata de una obra de títeres, cuya puesta en escena está a cargo de El Tramador Teatro.
Esta divertida y educativa obra relata lo que le pasó a Paquito, un niño que tenía un barrilete que su abuelita le había regalado por su buena conducta. Cuando el pequeño pudo elevarlo el viento era tan fuerte que se lo arrebató de las manos. Entonces el niño, mientras su abuelita preparaba la comida, salió a buscar su juguete sin decirle nada por miedo a que ella se enojara.
Cuando llegó al bosque se dio cuenta de que se había perdido y con miedo comenzó a buscar su barrilete y se encuentró con el malvado Escupelotodo, quien recluta a niños sucios, malcriados y mal olientes que no se lavan los dientes para que formen parte de su ejército.
Paquito se asusta cuando lo ve, pero Escupelotodo tenía el plan de secuestrar al niño, y por medio de engaños lo mete en una caja, porque Paquito sí se baña y lava los dientes, y eso no le gusta al malvado. En ese momento los niños dejaron de ser espectadores para formar parte de la obra y comenzaron a gritar para que la abuela lo rescatara.
La anciana llegó y le preguntó a Escupelotodo si había visto a su nieto, él le dijo que no, pero los niños le decían que la estaba engañando, el villano aceptó que sí lo tiene pero que no lo dejará ir, por lo que la abuela puso en práctica sus conocimientos de kung fu, y sometió a Escupelotodo, los niños le ayudaron a la anciana a abrir la caja y Paquito recuperó su libertad. Luego los dos encerraron a Escupelotodo en la caja y lo dejaron abandonado en el bosque.
Al final la abuela le dijo a su nieto que nunca volviera a salir de casa sin decirle, y que por un barrilete no arriesgara su vida, porque su seguridad es más importante.
Esta obra le enseña a los niños que algo material no es más importante que su bienestar, y que siempre que estén en problemas no tengan temor de pedir ayuda de sus papás o abuelitos, porque ellos sabrán comprenderlos y no permitirán que nada les pase.