Tegucigalpa, Honduras.- El resurgimiento del sarampión en distintos países de América Latina, ha generado preocupación en Honduras, lo que ha llevado a las autoridades sanitarias a emitir recomendaciones para detectar a tiempo posibles contagios.
En medio de este proceso de alerta y vigilancia, se han presentado casos sospechosos —ya descartados— y otros que resultaron ser confusiones, como pacientes que, tras presentar síntomas, aseguraron tener sarampión, cuando en realidad padecían varicela.
“Salieron unos casos por Intibucá, donde decían que era sarampión pero, en realidad, se trataba de varicela, es por eso que el Hospital Escuela, pensando en la población, publica algunas características de la enfermedad, para que la gente compare y entienda lo que es sarampión y varicela”, afirmó Said Norales, portavoz del Hospital Escuela.
Ambas enfermedades generan síntomas similares, como por ejemplo, fiebre alta, malestar en general, dolor de cabeza y dolor abdominal.
Si las molestias se extienden a problemas de conjuntivitis, tos seca, manchas blancas en la parte interna de sus mejillas y un sarpullido plano y rojizo, hay una alta posibilidad de que se trate de sarampión.
Pero, si además de los síntomas generales sólo surge un sarpullido con formación de costras y ampollas en diferentes partes del cuerpo, es probable que el paciente esté atravesando un proceso de varicela.
La característica clave para diferenciar ambas condiciones es el sarpullido, ya que, aunque ambos generan picazón, el del sarampión es totalmente plano, mientras que el de la varicela se produce como ampollas.
Cabe resaltar que ambas enfermedades son consideradas “altamente contagiosas”, y se pueden propagar a través del aire. En el caso del sarampión, el virus se mantiene activo en el ambiente por un buen tiempo, lo que multiplica las posibilidades de propagación.
Por esta razón y por los casos confirmados en México, Estados Unidos, Argentina y Canadá, la Secretaría de Salud decidió interponer algunas medidas que eviten un rebrote del virus dentro del país.
Una de ellas, es la aplicación de la vacuna. Los viajeros nacionales o extranjeros tendrán que portar su carné de vacunación completo, mientras que, en los establecimientos como el Hospital Escuela, lo están solicitando de forma obligatoria para los pacientes pediátricos entre los 0 y 11 años.
Los padres de familia que tienen hijos entre estas edades, deben asegurarse de que tengan las dos dosis de la vacuna: la primera se aplica a los 12 meses de edad y la segunda a los 18.
Las autoridades instan a la población a buscar el establecimiento de salud más cercano para aplicarse su dosis, en caso de que aún no la tengan. Además puntualizó que hay que mantenerse atentos a cualquier mínima sospecha de contagio.