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Revista Tictac: Leonel Messi: 'Se me cortaron las siestas...”

En el otro mundo de la estrella del Barça hay una esposa, tres hijos, una familia...

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20.03.2020

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Un déficit en la hormona del crecimiento quiso apagar sus sueños, pero su anhelo fue más grande que su deficiencia física y a los 13 años decidió cruzar el océano para convertirse en uno de los más grandes futbolistas de todos los tiempos.

“Al principio las inyecciones me las ponían mis padres, hasta que aprendí y lo fui haciendo solo”, cuenta el ganador de la inédita cifra de seis balones de oro: Lionel Messi; “en Barcelona crecí como jugador, sin perder lo que traía de Argentina”.

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El capitán y leyenda del Barça concedió una entrevista a Mundo Deportivo de España y otra a DAZN de Italia en las que habla más allá del fútbol. “Siempre recibí mucho cariño en todo el mundo, soy un agradecido, hago lo que me gusta y lo disfruto”, confiesa el argentino de 32 años que abre el libro de su exitosa vida en Tictac…

Lionel, cuéntenos de sus inicios en esto del fútbol…

Jugaba al fútbol de siete contra siete en Malvinas, la cancha de Newell’s, y era más delantero, pero ahí cada uno se movía por diferentes lados. Yo me movía por la parte de arriba, atrás del centrodelantero, ya de chiquito me sentía cómodo ahí.

Su fútbol evidencia la picardía del barrio, ¿verdad?

Tengo mucho de lo que aprendí en la calle, jugando en la cancha de piedra, de tierra, y luego le debo mucho claramente a la cantera de Barça, donde trabajé totalmente diferente a lo que había hecho en mi país. Es una filosofía diferente a la de cualquier parte del mundo.

¿Qué ha cambiado de aquel Messi que debutó con 16 años al de ahora?

Obviamente muchísimo. Son muchos años desde entonces y me pasaron muchas cosas en lo deportivo y lo personal. Estoy casado, con tres hijos. Son muchos años de experiencia en el primer equipo y creo que crecí muchísimo en ambas partes.

¿Qué tanto le cambió la vida el hecho de ser padre?

Desde que nació Thiago reduje mucho mis fiestas y ahora que tengo tres hijos, todavía más. El ritmo de mi vida depende mucho de los chicos: terminamos de entrenar, vuelvo a casa para comer rápido y salir a buscarlos al colegio. Se me cortaron mucho las siestas... ja, ja, ja.

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¿Cómo llevan sus hijos que su padre sea Messi?

Normal, normal. Thiago es el que más se da cuenta, pero les encanta el fútbol a los tres. Thiago y Mateo son los que más entienden, vienen a los entrenamientos y eso hace que estén más cercanos a mí.

¿Y Thiago tiene algún jugador preferido que no sea su padre?

Sí, tiene varios. Le gusta mucho el fútbol. Habla mucho de Luis Suárez, con el que tenemos más relación, de Antoine Griezmann, de Arturo Vidal desde el primer día por el pelo y todo eso. También de gente de afuera como Mbappé, Cristiano y Neymar. Thiago se conoce todo, pregunta todo.

Su esposa Antonella Roccuzzo le ha acompañado toda su carrera. ¿Qué papel ha jugado en el éxito de Leo?

Si bien siempre tuve mi familia al lado, fue fundamental empezar a vivir con ella en lo deportivo y en el día a día. Está en todos los momentos, sobre todo para sacarme del mundo del fútbol, que era muy difícil para mí. Fue y es una persona muy importante para mí.

Se vive bien en Barcelona, ¿no es así?

La verdad es que sí. Muy bien. Amo Barcelona, aunque extraño muchísimo Rosario. Esta es mi casa, estuve más tiempo acá que en Argentina; me encanta el lugar donde vivo, Castelldefels, y hago una vida feliz.

¿Pero cómo es la vida de una estrella como Messi en un día corriente?

Muy normal, muy pendiente de los nenes. Afortunadamente la profesión me permite pasar mucho tiempo con ellos, puedo entrenar, ir a comer con Antonella y recoger a los hijos.

Después estoy pendiente de alguna actividad que tengan antes de llegar a la noche, cenar y terminar muertos porque con tres terminamos destruidos. A dormir temprano... ja, ja. Martes y jueves los nenes tienen fútbol y venimos a la Ciudad Deportiva del club para la escuelita. Llegamos a las siete y media a casa y entre que toman un mate y cenan algo, pues tenemos una vida normal. Me gusta la rutina en mi profesión y en mi vida. Para mí, está espectacular y nos adaptamos.

Hace unos días falleció el basquetbolista Kobe Bryant. ¿Cómo lo vivió?

Me agarró por sorpresa. Estábamos con los nenes viendo el noticiero y no me enteré mucho hasta que lo escuché bien. Fue un shock, pensé que era una equivocación y que no podía ser cierto. Fue terrible.

¿Eso le hace valorar más lo que tiene?

Sí, cuando pasa algo así o una enfermedad importante pensamos en lo afortunados que somos y que tenemos que disfrutar, pero después entramos en el mundo este de no parar y de ir de un lado a otro y se te olvida, pero hay que tener presente lamentablemente hechos como este para saber disfrutar de la vida.

Hablando de fútbol, ¿qué tanto lo marcó la rivalidad con Cristiano Ronaldo?

Fueron muchísimos años y no es fácil mantenerse tantos años compitiendo en el máximo nivel y más en los equipos en los que estábamos, tan exigentes, como son Real Madrid y Barcelona, los dos mejores del mundo; competir de igual a igual tantos años quedará para siempre, fue muy lindo el duelo deportivo en lo personal y creo que la gente lo disfrutó.

Cuando ganó su sexto Balón de Oro habló de la cercanía del retiro. ¿Qué tan cerca está ese momento?

Se quedaron con eso, la realidad es que uno va cumpliendo años y no sabe, pero me siento muy bien, mejor que en años anteriores, y eso que no estoy haciendo goles como antes, pero a nivel físico y de piernas me siento muy bien.

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