Honduras

'Robo de armas nos tiene en precario internacional”

Director de la Policía afirma que le sugirió a Muñoz Licona hablarle de la crisis en la Policía al Presidente, pero este no quiso. Muñoz Licona se enfermó cuando se supo de podredumbre.

07.04.2014

Para Pompeyo Bonilla, ministro de Seguridad, el robo de armas de la Policía Nacional 'nos tiene en precario internacional'.

El funcionario así lo declaró ayer en el programa de televisión Frente a Frente, donde comentó que el robo de 'las armas nos tiene en precario a nivel internacional y mantiene en zozobra a la sociedad, porque la sociedad se preocupa cuando una gran cantidad de armas se ha perdido de la institución'.

EL HERALDO expuso en exclusiva, el pasado 31 de octubre, el extravío de 300 Fusiles Automáticos Ligeros (FAL) y unos 300 mil proyectiles calibre 5.56, del escuadrón especial Cobras, hecho que se registró en agosto de este año.

En la edición del 2 de noviembre EL HERALDO evidenció además que este mismo año se extraviaron 40 pistolas del Instituto Técnico Policial, 20 Pietro Beretta y 20 CZ.

En ninguno de los casos hay culpables, aunque se ha informado que una parte de este lote de armas podría haber sido vendido a grupos criminales en Guatemala.

Sobre eso, el ministro de Seguridad informó el lunes que solicitarán a los gobiernos de Guatemala y México que le faciliten números de series, fabricantes y tipo de armas decomisados en los últimos meses en esos países y de esa forma cotejar si en esos lotes hay armas de la Policía hondureña.

Otras naciones han expresado preocupación por el robo de este armamento, tal es el caso del ministro de Defensa de El Salvador, David Munguía Payés, que se comunicó con el ministro de Seguridad de Honduras para pedirle detalles de esas armas, ya que teme que el armamento se encuentre en su territorio.

Responsabilidad de ministros

Bonilla lamentó que esta situación se ha presentado por la falta de supervisión de quienes han administrado la Policía, en franca referencia a exministros y exviceministros de la Secretaría de Seguridad.

'Administrar no solo es firmar cheques o ver cómo se maneja el presupuesto, administrar quiere decir supervisar, supervisión de los bienes de los insumos y de todas las capacidades que tiene una institución y lamentablemente eso no se ha hecho', cuestionó.

Luego, apuntó que 'hemos perdido el rumbo, el sentido, las leyes son buenas en Honduras y cuando la Constitución, cuando la Ley de Policía establece que los ministros de seguridad dirigimos, fijamos políticas y administramos, no lo cumplimos a cabalidad'.

Sin embargo, Bonilla considera que adicionalmente hay otros factores que también han influenciado en la crisis que atraviesa la Policía.

'Este es un problema de toda la sociedad... dejamos lo que tenía que ser una mística en un desempeño responsable de la Policía, donde fallamos los políticos, donde fallaron los ministros de Seguridad y donde falló la misma Policía', analizó.

La crisis en la Policía salió a la luz pública luego que el pasado 22 de octubre asesinaran a los universitarios Carlos Pineda y Rafael Alejando Vargas, este último hijo de la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, hecho en el que se identificó a ocho policías vinculados al crimen.

Se quiso politizar la Policía

Coralia Rivera, viceministra de Seguridad, exteriorizó que el desborde de la Policía comenzó hace muchos años atrás, siendo uno de los factores principales la intención de politizar la institución.

A su juicio, hace años 'debimos haber advertido a las autoridades civiles que nos han dirigido, que la institución no debía verse con óptica política, que no podía llegarse a una institución como esta a hacer una especie de proselitismo interno con la finalidad de ganar protagonismo en beneficio personal y no en beneficio de la población'.

En opinión de Rivera esa 'intervención' con una óptica partidista y no institucional probablemente generó hasta divisiones dentro de la misma institución, en la oficialidad.

'Allí se comienza a generar una serie de desórdenes, a violentar la antigüedad... se va haciendo una acumulación de problemas... generan división porque comienza a crear grupos, unos que están en el poder y otros que están en el mando, pero sin poder... entonces se sectorizan y se resquebraja la disciplina que tanto le hace falta a esta institución', argumentó.

Inteligencia no funciona

El director de la Policía Nacional, Ricardo Ramírez del Cid, reforzó la tesis de que la intervención civil ha sido más negativa que positiva.

A Ramírez del Cid se le consultó en qué momento se perdió la Policía y respondió: 'Es necesario decirlo públicamente que se debe a la intromisión de la parte civil en lo que es la organización y operatividad de la Policía'.

A su criterio, con la 'intromisión civil' la institución 'pierde la jerarquía, se pierde la disciplina por intereses distintos'.

Adicionalmente, añadió que 'la inteligencia en sí no ha funcionado en la Policía'. La inteligencia 'no está organizada más que todo (solo) está señalada en la organización y esa es preocupación del señor ministro que ya ordenó que nos va a dar todo el apoyo para echarla andar porque eso es sumamente necesario', apuntó.

Muñoz no quiso informar

Ramírez del Cid comentó que a pesar de tener pocos recursos, los trabajos de inteligencia habían identificado redes de policías que se dedicaban a delinquir valiéndose del uniforme de la institución.

'Cuando venimos a reaccionar (en esta crisis) con la parte de inteligencia, la poca que existe, se reacciona y se ponen las cosas claras ante el director de ese momento (José Luis Muñoz Licona) y se le obliga para que se tomen las medidas, lástima que cuando se nos da la oportunidad no se tuvo el poder de convencimiento o tal vez lo hicimos solos y estas batallas y estas luchas no se ganan solos'.

Se le preguntó a Ramírez del Cid si ellos advirtieron de la situación de la Policía al exdirector, José Luis Muñoz Licona y Ramírez del Cid respondió: 'claro, él estaba consciente'.

Se le consultó entonces si Muñoz Licona trató de informar al secretario de ese entonces, Óscar Álvarez, y dijo que 'yo en determinado momento lo vi enfermo (a Muñoz Licona) entonces, yo lo miraba y decía ‘lo molesto mucho’, porque todos los días lo abordaba y le decía ‘hay que decirle al Presidente (Porfirio Lobo Sosa) la verdad, que él se dé cuenta de nosotros, de boca de nosotros, qué es lo que está pasando’'.

El director dijo que adicionalmente 'no hemos tenido la visión de ir más allá, porque seguimos trabajando con los esquemas de seguridad nacional de los 80, con estaciones en las salidas, donde en El Salvador esas cosas no existen, debemos cambiar'.

EL HERALDO hizo mi tesis

Coralia Rivera, viceministra de Seguridad, confesó que EL HERALDO se le adelantó en la investigación sobre la crisis que afecta a la Policía.

La comisionada relató que en 2008 ella comenzó a estudiar una maestría en Seguridad Humana de la Universidad de la Policía, donde había presentado el tema de tesis de investigación ‘La corrupción policial’, 'pero EL HERALDO se me adelantó'.

Ella recordó que propuso el tema al jefe de post grado hace dos años.

'En este momento ya estoy egresada de mi maestría pero no graduada porque estoy debiendo mi tesis, y con todo el material que salen aquí (EL HERALDO) son elementos para mi marco teórico y a veces digo que EL HERALDO ya me hizo mi tesis y ahora voy a tener que cambiar otro objetivo dentro del trabajo que ya había hecho'.

En ese sentido, 'lo que quiero decir es que estamos conscientes que este problema de corrupción venía afectando a nuestra institución desde hace mucho'.