Las quejas de los padres de familia en torno al cumplimiento de la jornada extendida en varios centros escolares del sur no se han hecho esperar.
Entre las principales reacciones en contra del nuevo sistema destacan la falta de vigilancia con que cuentan los alumnos al momento de las horas libre, como sucede de 11:30 a 1:00 de la tarde.
Y es que según comentó Debora Betancurt, madre de familia, en la actualidad se ve obligada a visitar la escuela a diario para cuidar de su hija durante el tiempo de receso.
“A diario camino media hora para llegar a la escuela y cuidar de mi hija, pese a que en la casa descuido a otros tres, pero debo venir hasta acá para al igual traerle el almuerzo, de lo contrario aguantaría hambre”, agregó.
Otros padres por su parte han comenzado a amenazar con solicitar el traslado de sus vástago hacia centros que no entraron en el nuevo sistema, como sucede con los padres de familia de la Escuela Francisco Morazán, ubicada en Los Mangles, Marcovia.
De acuerdo con Zenobia López, presidenta de los padres de familia de este centro educativo, la mayoría de los alumnos de la escuela viajan desde otras comunidades.
“Este nuevo horario nos ha venido a afectar tanto a nuestros hijos como también a las madres, pese a que son las mismas cinco horas de clase”, dijo López.
Según la entrevistada, luego de conocer la nueva disposición de Educación se han reunido con los docentes para exponerles las razones por las que no están de acuerdo con el sistema. “Mire, a las 11:30 hay que estar en la escuela dejándoles el almuerzo, de lo contrario el niño aguanta hambre; luego durante el invierno varias tendremos que venir a traerlos porque varios niños cruzan quebradas”, manifestó. Cada una de las quejas de los progenitores han sido trasladadas a los maestros, aseguró López, así como posibles soluciones, entre ellos extender la jornada hasta la 1:00 de la tarde como máximo.
Alumnos
La estudiante Britney Cristina Carranza, residente en la comunidad de la Fortuna, El Corpus, se incorpora el Centro de Educación Básica Alvaro Contreras tras caminar 90 minutos a pie y, según ella, se ha visto afectada ya que para almorzar espera hasta las 4:30 que retorna a su hogar.
“Mis papás me dan de comer en el desayuno y a veces, cuando mi papá logra llevar comida temprano, traigo algo para el almuerzo, pero de lo contrario aguanto hambre, porque no tienen para darme dinero para comprar algo de comer”, aseguró.
En el departamento unos 80,608 niños y adolescentes son los que permanecen bajo la enseñanza de la doble jornada, como sucede con Britney, de acuerdo con el informe de las autoridades de Educación.
La jovencita también forma parte de los 600,000 menores a nivel nacional que se incorporaron al nuevo sistema educativo público.
Autoridades escolares
La directora de la Escuela Francisco Morazán, María Magdalena Murra, explicó que cada una de las quejas han sido trasladadas a las autoridades distritales y a su vez a las departamentales.
“Nosotros podemos informar además que los niños que se van a sus casas a las 11:30 no regresan, en ocasiones hemos probado con quitarles la mochila, pero igual se quedan en sus casas”, manifestó.
En la actualidad hemos programado una reunión con los padres de familia para explicarles que la jornada continúa en la tarde y debemos cumplirla porque es una ley.
En las clases de la tarde quedan apenas 20 de los 122 menores que representan la matrícula del centro educativo.
“Nosotros no nos rehusamos a cumplir, pero si los padres y alumnos no están dispuestos a apoyarnos será difícil”, expresó la docente.
En la institución que representa Murra, según nos informó, lo que han implementado es iniciar las clases a las 7:30, pues los niños llegan siempre a las 7:00 y los sacan al receso a las 12:00 con el fin de aprovechar el tiempo.
“Con los alumnos que quedan les aplicamos dictados”, reveló.
En el Centro Básico Álvaro Contreras, ubicado en el municipio de Santa Ana de Yusguare, ha surgido otro problema.
El director Simón Antonio Majano informó que en el centro estudiantil se presenta un problema luego que dos maestros abandonan las aulas al mediodía para incorporarse a otro centro educativo donde también tienen plaza.
Por esta razón los alumnos de séptimo a noveno se quedan sin clases a partir del mediodía y no hay nadie que los atienda.
En el departamento funcionan 919 centros educativos donde se imparten clases de primero a noveno grado, de los cuales 617 centros los que deben funcionar bajo la jornada extendida.
Estos representan el 6,40 por ciento del total de centros escolares a nivel nacional que funcionan bajo esta nueva iniciativa.
Levantamiento de datos
La jefe del departamento de infotecnología de la Secretaría de Educación, Mirian Herrera, dijo que en la actualidad se han comenzado a realizar giras en los municipios para conocer cada una de las quejas de los padres y maestros.
“Los docentes tienen que cumplir con los horarios establecidos de 8:00 de la mañana a 3:00 de la tarde, con el receso de una hora y media de 11:30 de la mañana a 1:00 de la tarde”, enfatizó la funcionaria.
En el caso de los docentes que tienen jornada plena, si se sienten afectados están obligados en el término de dos meses para tomar decisiones sobre en que centro educativo se quedarán para evitar que los menores estén sin recibir sus clases.
