Tegucigalpa, Honduras.- La matrícula en la educación superior en los últimos años ha tenido un comportamiento desigual, mientras las universidades privadas registran un crecimiento sostenido, las públicas enfrentan una disminución constante de estudiantes.
De acuerdo con informes de la Dirección de Educación Superior (DES) la matrícula universitaria del país se ha mantenido relativamente estable, pasando de 242,201 alumnos en 2020 a 247,706 en 2024.
Sin embargo, la tendencia cambia cuando se separan los sistemas público y privado; los datos analizados muestran que las universidades privadas aumentaron su matrícula de 118,418 estudiantes en 2020 a 144,109 en 2024, lo que representa un crecimiento del 22%.
A partir del año 2022 el crecimiento de la matrícula en el sector privado es de manera sostenida año con año; entre el 2022 y 2024 se sumaron más de 23,000 nuevos alumnos.
En contraste, las universidades públicas pasaron de 123,782 estudiantes en 2020 a 103,597 en 2024, lo que indica una caída de más de 20,000 estudiantes, equivalente a un 16%.
La disminución se acentuó especialmente desde 2021, cuando todavía superaban los 125,000 matriculados.
Este comportamiento genera preocupación entre autoridades del sistema de educación superior, quienes coinciden en que existen factores estructurales que explican la preferencia creciente por las instituciones privadas.
Para Hermes Alduvin Diaz, exrector de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), los datos tienen que ver con la oferta académica que brindan las universidades del país.
“Se ha podido observar en los últimos datos que se tienen que hay universidades privadas que están apostando más por las carreras cortas, o sea, carreras de dos años de formación universitaria en áreas técnicas emergentes del conocimiento”, dijo.
Agregó que en las universidades públicas la apuesta por la formación técnica es más lento, por lo que es necesario dinamizar la oferta educativa, haciéndola más atractiva para los jóvenes y más vinculada al mundo del trabajo.
Jóvenes consultados indicaron que si bien la educación universitaria pública del país es de calidad, hay factores como el tiempo, perdida de clases, entre otros que hacen que los jóvenes se inclinen a la educación privada.
Lexi Medina, rectora de la UPNFM, coincidió en que la oferta académica de las privadas es mayor; sin embargo, defendió que las públicas cuentan con grandes carreras y están actualizando sus planes de estudios.
“La educación pública desde la educación prebásica hasta la educación superior en nuestro país tiene calidad, los mejores profesionales que están fuera y dentro del país han sido formados en la educación pública”, remarcó.
Reconoció que es necesario fortalecer las universidades públicas mediante estrategias que aumente la matrícula, entre ellas incentivos económicos.
“Necesitamos incentivos para nuestros estudiantes. Las becas son oportunas para los que vienen del interior del país; becas de matrícula, alimentarias, también que permitan tener una habitación donde ellos puedan tener seguridad, mediante eso podemos fortalecernos como instituciones. La promoción de becas es importante”, apuntó.
Otros entrevistados indicaron que las universidades públicas deben generar acciones que permitan aumentar su matrícula.