Tegucigalpa, Honduras.- Una decisión crucial que podría cambiar el destino migratorio de miles de hondureños amparados bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS) en Estados Unidos está en espera.
El próximo 29 de julio, la Corte Federal del Distrito 9 en California, emitirá una resolución sobre la cancelación del programa para Honduras, tras una demanda que cuestiona el proceso de notificación por parte del gobierno estadounidense.
El presidente de la Fundación 15 de Septiembre, Juan Flores, explicó que existe una alta expectativa de que la Corte ordene una nueva prórroga de seis meses, hasta enero de 2026, al considerar que el Departamento de Seguridad Nacional no cumplió con los procedimientos establecidos por ley.
"La notificación de cancelación del TPS llegó apenas tres días después de su vencimiento, algo nunca antes visto y considerado como una decisión caprichosa", declaró Flores.
El activista migrante recordó que Honduras aún enfrenta condiciones que justifican su inclusión en el programa.
"La violencia, la corrupción, los efectos del cambio climático, la sequía y la crisis política actual son elementos que siguen afectando al país y que el mismo Departamento de Estado ha reconocido recientemente", dijo.
Por estas razones, la comunidad hondureña espera que el juez valore el contexto humanitario para frenar la cancelación definitiva.
Aunque una eventual prórroga traería alivio temporal, el proceso legal continuará.
Flores advirtió que, si la decisión judicial es favorable para los tepesianos, el gobierno de Estados Unidos podría apelar, alargando el litigio hasta llegar a la Corte Suprema.
“Lo que estamos haciendo es ganando tiempo. Tiempo para buscar salidas estratégicas que garanticen protección migratoria a largo plazo para nuestros compatriotas”, reveló.
Entre las salidas posibles, Flores mencionó la esperanza de que un nuevo gobierno en Honduras gestione adecuadamente una nueva solicitud de TPS, con mayor acercamiento a las autoridades estadounidenses.
Lo que viene después de enero dependerá de cómo evolucione el proceso en las cortes y de las gestiones diplomáticas que se realicen”, agregó.
Peligro de estafa
No obstante, la incertidumbre ha abierto la puerta a otro problema creciente, las estafas migratorias.
Flores denunció que muchos hondureños están siendo víctimas de individuos que se hacen pasar por abogados de inmigración, prometiendo soluciones rápidas a cambio de sumas elevadas de dinero. “Recientemente logramos evitar que un compatriota pagara $10,000. Ya había entregado $7,000 por un proceso falso”, alertó.
Estas redes operan a través de páginas web y WhatsApp, contactando a migrantes de forma muy convincente.
“Hacen videollamadas, se presentan como supuestos agentes del consulado o incluso como jueces en conferencias virtuales. Es una mafia bien estructurada que ha estafado a muchos”, denunció.
Flores detalló que en varios casos estas redes parecieran tener origen extranjero y ya han sido vinculadas a otras estafas como la tramitación fraudulenta de pasaportes.
Ante este escenario, el llamado es a informarse bien y acudir a fuentes confiables.
“Recomendamos que acudan al consulado hondureño, aunque reconocemos la falta de comunicación con nuestras autoridades. También pueden acercarse a organizaciones como la Fundación 15 de Septiembre. No deben dejarse engañar ni actuar bajo presión, por muy desesperante que sea la situación”, enfatizó el dirigente migrante.