Elegantes, sofisticados, a ratos seductores y de vez en cuanto estrafalarios, son los looks que deja la alfombra roja del 69º Festival de Cine de Cannes.
Desde una impresionante Eva Herzigova vestida de blanco a lo Marilyn Monroe, hasta una atrevida y sensual Bella Hadid que se convirtió en la mujer de rojo con un atuendo del diseñador Alexandre Vauthier, que no dejó nada a la imaginación.
La alfombra roja de Cannes se ha teñido de color estos días. El amarillo ha sido uno de los reyes. Sí, y en todas sus variaciones: cítrico, metalizado, pastel.
Seguro tardaremos en olvidarnos del diseño de inspiración helénica, firmado por Atelier Versace, de Amal Clooney. El tono, la tela, el corte… un vestido digno de la cita. También optaron por este color las actrices Jessica Chastain, Anna Kendrick, Kirsten Dunst y Blake Lively.
Y qué decir del ‘jumpsuit’, que vino a la conquista. De hecho, el Festival lo inauguró Blake Lively con el suyo, en rojo pasión y firmado por Juan Carlos Obando. Una buena manera de llamar la atención. Además, otras celebridades han optado por él como la cantante Cheryl o la ‘top’ Kendall Jenner, entre otras.
De los accesorios ni hablemos, las joyas más impresionantes han desfilado en Cannes. Desde la enorme esmeralda que lucía Julia Roberts hasta los pendientes tipo lágrima de Kendall Jenner.
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Ahí también ha cobrado vida las transparencias, como el diseño de la modelo francesa Laetitia Casta y Gigi Hadid, entre otras. O las maxiflores en tonos coral del vestido rosa empolvado de Kristen Dunst, hasta el abrigo con un cierto aire premamá-glam de Chanel de Blake Lively.
Otros colores de la red carpet de Cannes son el azul zafiro y el blanco, una de las tonalidades estrella que dictan los veranos en la Riviera Francesa, y que muchas de las estrellas invitadas al Festival han traslado a la alfombra roja.
Espectaculares y vestidas prácticamente de novia, Kristen Dunst y Livia Firth, con vestidos princesa y péplum de encaje con el mismo tipo de escote palabra de honor, y también de día, con mini vestidos, faldas lápiz, camisetas de Chanel, dos piezas de Louis Vuitton de Caitriona Balfe, y largos 'midi'.
Si de escotes hablamos, el geométrico fue el centro de todas las miradas.
Y se traduce en el de la top model Bella Hadid, entre otras, vestida por Roberto Cavalli Couture, mezclando en un mismo 'look' escote 'criss cross', lentejuelas doradas y cuello 'choker'.
Sin duda ella representó el límite. Además de un pronunciado escote, una falda con abertura… Tanto, que tuvo que controlarlo continuamente para no mostrar más de lo debido. Eso sí, nada de vuelo en el tejido al más puro estilo de la película. Pero no pasa nada, para dotar de movimiento a su vestido –y completar el ‘homenaje’ al filme- llegó Rosie Huntington-Whiteley con otro diseño de Vauthier. Seducción ‘x 2’ también en rojo pasión.
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