LAS VEGAS, ESTADOS UNIDO.- Emilia Clarke, la protagonista de “Juego de tronos”, dio detalles de cómo superó la aneurisma con la que batalló en medio del rodaje de la serie transmitida por HBO.
Pese a las complicaciones no todo resultó negativo, puesto que, ese duro episodio de su vida la motivó a crear la fundación SameYou con la que busca apoyar a otros pacientes que atraviesan lo que ella sufrió; a través de la asociación, crea conciencia sobre las causas, prevención y tratamientos tras una lesión cerebral.
La actriz también habló acerca de su personaje en la popular producción y explicó qué aspectos la unen a la guerrera Daenerys o “madre de los dragones”.
¿Por qué hasta ahora decidió dar la noticia sobre su condición médica?
La razón principal por la que lo dije fue la organización benéfica que fundé, llamada SameYou. Trato de llamar la atención sobre todo lo que necesitan los pacientes con ese tipo de lesiones, para así aumentar sus posibilidades de recuperación. Realmente creo que puedo ayudar, logrando una concientización sobre causas, prevenciones y tratamientos tras una lesión cerebral. Entonces, alguien puede ver eso y pensar: “¡oh!, si la ‘madre de los dragones’ puede hacerlo, entonces yo también puedo”.
¿Cómo fue su experiencia postrauma al respecto?
Fue dura. Y precisamente esa es la idea de SameYou, debido a que pasas mucho tiempo en el hospital, donde todos te dicen: “estás enfermo, vas a morir. Debes estar asustado”. Y de pronto un día te dan de alta. Y luego vas a casa, que es todo lo que has querido, y comienzas a preguntarte: “¿qué pasa si muero? Me dijeron qué pasaría y ahora estoy aquí”, y me sentía insegura y muy asustada. Y, tras mi lesión cerebral, en particular, esa sensación es mayor entre muchas de las otras repercusiones que se tienen. Pero es en ese aspecto mental en donde siento que no hay mucho trabajo.
¿De qué manera se identifica con su personaje más popular, Daenerys, tras todos estos años de interpretación?
Las cosas que tenemos en común con Daenerys, creo, se basan en que ambas tenemos una sed de conocimiento, somos inquisitivas y, como ella, aprendí que el conocimiento es poder, y de esa forma trato de no cometer el mismo error dos veces.
¿Cree que su papel ha sido un modelo para las mujeres jóvenes de hoy?
Sí, creo que ha habido algo de similitud entre lo que ha vivido Daenerys Targaryen y lo que he vivido en lo que a la lucha por sobrevivir se refiere. Y eso quedó en mi inconsciente tras mi episodio con los aneurismas. Y en cuanto a ser un modelo, bueno, eso es debatible [risas], pero en el caso de mi personaje, lo interesante es que ella comenzó sin ninguna clase de poder.
Su personaje pasó de ser víctima a ser una fuerza poderosa…
Definitiva y enormemente, fue un aspecto que me atrajo de ese personaje. Porque no sabía de quién se trataba cuando la conocí. Y, como mujer joven, para encontrar un papel que tenga eso, que tuviera ese alcance y ese rango histriónico, fue simplemente increíble. ¡Absolutamente increíble!, ¡sí!
¿Cómo fue que decidió dedicarse a la actuación?
Fue algo que sucedió cuando tenía unos tres años de edad, según me han contado mis padres. Tal vez porque mi padre trabajaba y trabaja en el teatro; entonces, él me llevaba y yo asistía desde muy joven. Mi papá me contaba que yo era muy bulliciosa y descubrió alguna vez que la única forma de mantenerme concentrada y callada era llevarme a ver obras teatrales, y que una vez me quedé en silencio durante todo el Show Boat, en el West End, de Londres. Estuve en silencio las dos horas completas, ¡ja! Al salir del show, lo primero que le dije fue que ya no quería ser una princesa, sino estar en un escenario. Creo que tenía unos cuatro o cinco años de edad, y esa fue la ocasión en que por primera vez dejé intuir que quería ser actriz, algo que agradezco que mis padres apoyaran.
¿Cuáles son los actores que admira y sigue?
Bueno, para alguien de mi generación, como joven británica, admiro a Carrie Mulligan. Creo que tiene un talento increíble. Es una especie de elección obvia para mí, solo creo que es supertalentosa y una brillante embajadora de los jóvenes británicos. Por lo demás, pues obviamente a la reina, a Meryl Streep [risas], a Imelda Staunton y a Judi Dench.
¿Y actores masculinos?
¿Sabe que no lo sé? Yo tiendo a admirar a las mujeres más que a los hombres solo porque, como actriz, uno mira sus carreras y piensa: “¿es posible que pueda hacer lo que ella hace?” y “¡esos son los papeles que quisiera interpretar!”.
Su relación con el éxito y la fama debe ser interesante. ¿Cómo ha sido ese proceso de lidiar con el estrellato en su vida?
Ese es un aspecto de mi profesión muy complejo, porque una vez estás en ese círculo, no hay forma de escapar. Para mí, ha transformado por completo mi vida porque antes de “Juego de tronos” tenía tres trabajos y acababa de salir de la escuela de teatro, así que realmente no estaba en este reino donde nos encontramos ahora.