El chimpancé rabioso de "Primate" aterroriza las salas hondureñas desde mañana
Honduras recibe mañana el primer gran estreno de terror de 2026: un thriller claustrofóbico protagonizado por un chimpancé rabioso y el ganador del Oscar Troy Kotsur
- Actualizado: 31 de diciembre de 2025 a las 13:49
La película de Johannes Roberts con Troy Kotsur se estrena mañana 1 de enero como el primer gran estreno de terror de 2026, prometiendo violencia extrema con un chimpancé rabioso como protagonista.
El terror animal desembarca mañana en las salas hondureñas con Primate, la cinta dirigida por Johannes Roberts que narra la historia de una familia cuyo chimpancé doméstico contrae rabia y desata una ola de violencia.
La película, que llegará a través de Paramount Pictures, ha recibido la clasificación R por su contenido violento y sangriento.
El filme tuvo su estreno mundial en Fantastic Fest 2025 en septiembre pasado, donde la crítica destacó su apuesta por los efectos prácticos y su ritmo vertiginoso de menos de 90 minutos.
Roberts, conocido por 47 Meters Down y Resident Evil: Welcome to Raccoon City, construye la trama alrededor de una familia hawaiana y su mascota, Ben, un chimpancé que ha convivido con ellos durante años.
La historia arranca cuando Lucy (Johnny Sequoyah), la hija mayor, regresa a casa tras un tiempo alejada para procesar la muerte de su madre.
Acompañada de amigos, se reencuentra con su padre (Troy Kotsur, ganador del Oscar por CODA) y su hermana menor, además del aparentemente inofensivo Ben. Sin embargo, cuando el animal contrae rabia, la convivencia pacífica se transforma en una pesadilla de supervivencia.
Según la crítica especializada, Primate dedica su primera mitad a establecer las dinámicas familiares y el duelo por la pérdida de la madre, antes de virar hacia un terror visceral centrado en el hogar y, particularmente, en la zona de la piscina.
Roberts, cuya filmografía incluye títulos como The Strangers: Prey at Night y The Other Side of the Door, se mantiene fiel a los tropos del género: decisiones cuestionables de los personajes y coincidencias narrativas que, aunque predecibles, no restan eficacia al conjunto.
La actuación de Kotsur, primer actor sordo en ganar un Oscar, aporta una capa emocional que contrasta con la brutalidad de la premisa.