“Ha crecido muchísimo y es una de las mejores de la Concacaf. Es una árbitra bastante disciplinada”.
“José Ramírez, hijo de Emiliano, me ve por la tele y se toma el tiempo de escribir en un papelito cosas que debo mejorar; siempre está apoyándome en la estética arbitral, en la lectura de juego y me da consejos de vida”.
En un torneo eliminatorio femenino de la Concacaf, dirigiendo a las estadounidenses...
“Tenía 17 años cuando llegué a la Filial de Tegus, que estaba impartiendo un curso para aspirantes; quería ser asistente, seguir los pasos de mi tío, pero luego me metí a la UNAH. En 2011 me incorporo formalmente al arbitraje”.
“¿Error? En un Sub 20 entre Panamá y Costa Rica la portera tica derribó a una rival en el área, pité penal, pero no miré que venía otra panameña sola. Hubiera concedido la ventaja, me hubiera tomado dos segundos para decidir”.