Tegucigalpa, Honduras.- La lentitud en la ejecución de varios proyectos de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT) mantiene en frustración a miles de capitalinos que esperaban ver mejoras en sus barrios y colonias desde hace meses, e incluso años.
Entre las obras más mencionadas figuran la pavimentación de Lepaterique y Mateo, la pavimentación en la colonia Reynel Fúnez, la rehabilitación vial en la colonia Villeda Morales y la ampliación de la salida hacia Olancho, todas con avances mínimos y múltiples promesas incumplidas.
Entre estos proyectos destaca la pavimentación de la colonia Reynel Fúnez, una demanda histórica debido al deterioro de sus calles y los constantes problemas de accesibilidad.
Entre 2018 y 2020, los residentes protestaron en varias ocasiones y exigieron la intervención de las autoridades. Con estas manifestaciones se lograron compromisos públicos para pavimentar, sin embargo, no se cumplieron.
El ministro de la SIT, Octavio Pineda, prometió concluir la obra antes de las elecciones de 2025, pero el escepticismo persiste. Los vecinos insisten en que no quieren más promesas, sino calles terminadas.
Proyecto Villeda Morales
La pavimentación de la colonia Villeda Morales fue anunciada por la SIT como parte del plan de mejora vial de Tegucigalpa. El proyecto contempla la reconstrucción de una vía de entre seis y siete kilómetros que conecta el sector de Lomas de Toncontín con la colonia.
Pineda indicó que esta pavimentación tiene una inversión estimada en 34 millones de lempiras. El proyecto arrancó oficialmente en junio de 2025, pero los avances han sido lentos.
En recorridos por la zona se ha observado maquinaria detenida, tramos con trabajos inconclusos de terracería y grandes cráteres que dificultan el paso de los vehículos.
Los vecinos aseguran que, pese a los anuncios, las condiciones viales siguen igual o peor que antes del inicio de la obra. “Solo vienen a tomar fotos y luego desaparecen. No se ven las mejoras”, expresó una residente del sector.
Salida hacia Olancho
El proyecto de ampliación de la salida a Olancho, también a cargo de la SIT, sigue inconcluso. El contrato fue firmado el 29 de diciembre de 2022 con un plazo de ejecución de 12 meses, pero más de dos años después, la obra aún no ha terminado.
Según los planes, la ampliación cubriría 7.22 kilómetros y aliviaría el congestionamiento en una de las rutas más importantes de la capital, en la salida hacia el departamento de Olancho.
Los trabajos han enfrentado constantes paralizaciones. En 2023 se reportaron los primeros avances, pero a mediados de 2024 y gran parte de 2025 el proyecto quedó estancado.
Residentes de colonias como Cerro Grande han denunciado múltiples promesas incumplidas de la SIT y la falta de maquinaria en el lugar. En agosto de 2025, la institución anunció que retomaría los trabajos y que la obra estaría lista en 100 días.
Han pasado 90 días desde el 10 de agosto sin que haya avances visibles. Los pobladores de esta zona tachan al ministro Octavio Pineda de mentiroso por las múltiples promesas incumplidas.
La ampliación de la salida a Olancho es considerada una obra estratégica para aliviar el tráfico en la zona.
Por otra parte, proyectos como el libramiento de la salida al sur y la conclusión de la reconstrucción de la carretera al Zamorano, Güinope y otros municipios también permanecen inconclusos.