Tegucigalpa, Honduras.- Cuando una alcantarilla se obstruye y el líquido se ve obligado a salir a la superficie la tortura para el olfato es insoportable. Bajo ese castigo se encontraban los vecinos de la Residencial El Dorado, ubicada en la capital de Honduras, quienes durante tres días tuvieron que soportar el olor a residuos.
Lamentablemente, ellos no son el único caso de la capital, ya que, según los registros de La Unidad Municipal de Agua Potable y Saneamiento (UMAPS), en lo que va de 2025 han atendido más de 1,700 denuncias por obstrucción de alcantarillados sanitarios y sistemas de drenajes.
El ingeniero Jorge Pérez, subgerente de Alcantarillado Sanitario y Drenaje Pluvial de la UMAPS, aseguró a EL HERALDO que la unidad atiende un promedio de 20 problemas diarios relacionados con alcantarillas, es decir, un aproximado de 600 mensuales.
Este promedio es solo para la temporada de verano, ya que, según Pérez, “en la época de invierno se nos duplica o a veces hasta triplica la cantidad de cuadros en un mes, comparado con la época de verano. Esto debido a que hay mucha interconexión de aguas lluvias, sistema de alcantarillado sanitario, entonces esto complica la operación”.
EL HERALDO se movilizó hasta la Residencial El Dorado para atender una de las cientos de denuncias sobre el rebalse de aguas residuales que se da en la capital. Al llegar, la calle de tierra se encontraba inundada del líquido residual que luchaba por traspasar unos muros de arena improvisados.
Aparte de las molestias de los vecinos, las quejas también surgieron de un grupo de trabajadores que fue contratado para pavimentar esa misma calle. “Eso tiene como tres días de estar así, eso nos atrasa”, esas fueron las palabras de uno de los constructores.
El equipo de EL HERALDO conversó con Noel Valdivia, uno de los trabajadores de la UMAPS que se encontraban en el lugar para consultarle sobre la cantidad de denuncias que reciben y atienden a diario, pero, al parecer, no tienen un número en específico.
“Hasta dónde nos alcanza el día, la prioridad es atender a la población, hacer de buena manera nuestro trabajo”, expresó Valdivia.
“Hay trabajos que salen fáciles y hay unos que salen difíciles, puede ser de una hora, dos horas, depende del día”, aseguró el trabajador, no obstante, cuando la obstrucción es abundante, se pueden llegar a tardar hasta dos días completos.

Obstrucciones
La obstrucción de alcantarillas y sistemas de drenaje sucede por una diversidad de razones. En el caso de la Residencial El Dorado ocurrió porque el material de construcción que se está utilizando para la pavimentación de la calle había tapado la línea por donde fluye el líquido.
Pero, según Valdivia, no siempre es así, en la mayoría de casos se da porque la gente es muy descuidada con los residuos de sus viviendas.
“Todo está en el cuidado de la ciudadanía. Uno encuentra basura, trapeadores, papel higiénico, toallas sanitarias. Entonces uno mismo no tiene conciencia para poder cuidar a nuestros colectores y que hagan bien el trabajo”, expresó Valdivia, trabajador de la UMAPS.
Según registros de la UMAPS, hay al menos 10 colonias que son las que más incidencia tienen durante todo el año. La primera es la Kennedy, que durante 2024 reportó 284 cuadros o eventos de este tipo.
Luego está el Hato de En medio con un reporte de 97, la Miraflores con 95 y la colonia 21 de Octubre con 87.
Los registros también comprenden las Lomas del Guijarro, la 3 de Mayo, el Reparto por Arriba, la Arturo Quezada y El Bosque.