Una plática entre cuatro supuestos amigos se convirtió en tragedia: dos murieron en una casa en la colonia San Carlos de Sula.
David Eduardo Lobo Padilla (32), comerciante, y Jorge Alberto Rivera Herrera (47), fueron las víctimas mortales.
Rivera Herrera llegó a la casa a las 9:00 am para realizar la instalación de una lavadora y revisar en sistema eléctrico de la casa.
Según testigos, las víctimas estuvieron en compañía de dos hombres con los que departieron en la sala de la casa.
A las 12:10 meridiano, el silencio en la colonia fue interrumpido por al menos cinco explosiones que provenían del interior de la casa.
Inmediatamente después, dos vehículos que estaban en la calle frente a la casa salieron en veloz carrera. En ellos iban los autores del crimen.
Testigos afirman que los carros eran un pickup Toyota Tacoma, blanco, y un Toyota 3.0, color vino.
Leonel Sauceda, jefe de la Policía de San Pedro Sula, dijo que el doble asesinato podría estar relacionado con la incautación de 12 vehículos el pasado sábado en la misma colonia.
Estos fueron encontrados aproximadamente a dos cuadras de la vivienda donde se produjeron las muertes.
En estos carros se encontraron 450 mil dólares y 32 paquetes de cocaína. Sauceda dijo que tienen información del posible vínculo en los dos casos.
Un equipo de la DNSEI realizó ayer un allanamiento en una vivienda ubicada entre la tercera calle y la 14 avenida del barrio Los Mangos, en Puerto Cortés, donde se detuvo para investigación a Fredis Ovidio Rivera Castellanos (35) y a Juan Carlos Espinoza Velásquez (23).
Rafael Rodríguez Puerto, jefe regional de la DNSEI, informó que el último supuestamente laboró desde el 2008 con el propietario de la vivienda donde se encontraron los vehículos decomisados en San Pedro Sula y presuntamente abandonó ese trabajo el pasado viernes.