Los primeros implicados en la masacre que dejó cinco muertos y dos heridos en la colonia Villa Madrid, kilómetro 10 de la carretera que conduce a Olancho, ya están a la orden de la justicia.
En un operativo en coordinación con fiscales del Ministerio Público, agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) capturaron a cuatro presuntos miembros de una mara que habrían participado en la matanza en un sector de la colonia Enmanuel, carretera a Olancho.
La DNIC identificó a los supuestos criminales como Jimmy Anthoni Cruz Gómez, José Ricardo Figueroa, de 22 años; Carlos Humberto Molina Canales, de 23 años y Karen Yesenia Vásquez Izcano, de 32 años, presuntos integrantes de la MS-13.
La DNIC confirmó que Cruz Gómez tiene una ficha por el delito de robo con fecha 11 de noviembre del 2012, mientras que Molina Canales tiene antecedentes policiales por escándalo en vía pública, violencia doméstica e intrafamiliar.
Los imputados fueron enviados al juzgado competente por suponerlos responsables de los delitos de asesinato en perjuicio de José Luis Valle Sevilla, de 32 años; Pedro Luis Rodríguez Molina, de 28; David Antonio López Martínez, de 17; Edwin Josué Orellana, de 27 y Wilmer Alberto Carranza, de 22 años.
También enfrentarán un proceso por asesinato en su grado de ejecución de tentativa en contra de Rosa María López, de 46 años y Marvin Lenín García Sauceda, de 17 años, lo mismo que por asociación ilícita y portación ilegal de armas, según informó la DNIC.
Mientras tanto, equipos de inteligencia continúan con las diligencias investigativas orientadas a capturar a otros implicados en el múltiple crimen, así como la incautación de evidencias.
Matanza y operativos
El viernes alrededor de las 7:00 de la noche varios malhechores a bordo de un microbús color café llegaron hasta la colonia Villa Madrid, donde un grupo de aproximadamente 12 personas se encontraban en una pequeña plaza.
Con los rostros descubiertos, los criminales abrieron fuego hacia el grupo desde el interior del vehículo con fusiles AK-47 y R-15, lo que dejó el saldo fatal antes indicado.
En la escena del crimen quedaron varios casquillos de bala, así como un fusil R-15 cerca del cuerpo sin vida de Valle Sevilla y una pistola 9 milímetros, los que fueron levantados por técnicos de la Sección de Inspecciones Oculares de la DNIC.
Basado en las investigaciones preliminares, el portavoz de la Secretaría de Seguridad, Leonel Sauceda, dijo que Valle Sevilla tenía el arma en su poder y que habría disparado con la misma, sin embargo, los agentes verificaron que fueron los criminales los que la dejaron en la escena del crimen.
Equipos de la Sección de Homicidios de la DNIC y de otras unidades de inteligencia iniciaron las investigaciones en el lugar donde se produjo la masacre en busca de pistas para dar con el paradero de los asesinos.
Después de varias horas de trabajo en conjunto con fiscales del Ministerio Público, un equipo del cuerpo policial procedió a realizar un operativo en la colonia Enmanuel que dejó como resultado la captura de las cuatro personas.
Aunque no quiso profundizar en detalles, para no entorpecer las investigaciones, el portavoz de la Secretaría de Seguridad, Leonel Sauceda, confirmó que hay pruebas técnicas y humanas que “están completamente relacionadas con la participación de estos jóvenes en este hecho”.
Según el informe de los investigadores, la Fiscalía decidió emitir orden de detención preventiva luego que se presentara un expediente en el que se remitía toda una serie de investigaciones de campo, pruebas testificales y otros medios probatorios en contra de los imputados realizadas durante las 24 horas posteriores al hecho.
Sauceda confirmó que tres de los cuatro detenidos están vinculados directamente en la masacre, mientras que la fémina Karen Yesenia les apoyó con información sobre el lugar donde estaban las víctimas.
Pelea de territorio
El oficial Sauceda sostuvo que el múltiple crimen sucedió por pleito de territorio entre bandas criminales para sus actividades delictivas.
Confirmó que los autores materiales de la muerte de las cinco personas son miembros de la MS, mientras que el ataque iba dirigido a personas pertenecientes a la pandilla 18, aunque aclaró que no todos los que estaban en el sector pertenecían a esa organización.
“Claro está que a veces hay una o dos personas que solo son simpatizantes o hay otras que solo van pasando por el lugar y que lamentablemente cuando ocurren estos hechos pierden la vida producto del intercambio de disparos”, expresó.
Sauceda detalló que, además de disputa de territorio, como móvil se maneja la venganza, porque “la información que nosotros manejamos hasta el momento es que entre las personas que fallecieron habían atacado a estos integrantes de la mara MS en la colonia Enmanuel”.
Explicó que la disputa de territorio entre los grupos es por acaparar y extender más espacios en lo que es la venta y distribución de drogas, también el cobro del impuesto de guerra, lo que es el delito de la extorsión. Reveló que ya hay presentación ante la autoridad correspondiente de algunas armas, pero que se sigue trabajando en detalles específicos de la investigación que no se pueden revelar para no entorpecer la investigación.
En torno a las dos armas encontradas en la escena del crimen, el vocero policial dijo que con base en lo que se ha investigado, una (el fusil) era de los homicidas, quienes cometieron el hecho y “al final, para despistar a la Policía Nacional, se la lanzaron a las personas que estaban muertas” .
Prosiguió que la pistola 9 milímetros la portaba uno de los fallecidos, de acuerdo con las investigaciones.
Equipos de investigadores continúan con el trabajo en la zona con el fin de identificar y capturar a otros que habrían participado en el hecho.