Un médico y dos de sus cuatro guardaespaldas fueron capturados y puestos a la orden de la justicia en allanamientos simultáneos realizados por el Ministerio Público a través de la unidad de investigación de muerte violenta de mujeres adscrita a la Fiscalía de la Mujer.
En el operativo se dio captura al médico Erwin Francisco Mejía Pineda (48) y sus guardaespaldas Ramón Cruz Enamorado (46) y Eliseo Lazo Castillo (38).
A Mejía Pineda se le acusa del delito de asesinato en el grado de ejecución de tentativa en perjuicio de la coordinadora de fiscales en Marcala, La Paz, Xiomara Yamileth Benítez, quien fue víctima de un atentado criminal ocurrido la madrugada del sábado pasado en su residencia en el departamento de La Paz.
En el atentado fue lanzado un artefacto explosivo a la vivienda de la acusadora pública que ocasionó daños a su vehículo, ventanales, puerta y techo de la casa.
Mientras tanto, a los dos guardaespaldas se les acusó por el delito de posesión de armas y municiones prohibidas.
En horas del mediodía el médico fue trasladado bajo estrictas medidas de seguridad a la 105 Brigada de Infantería ubicada en San Pedro Sula, para la realización ayer de la audiencia de declaración de imputado ante el juez de jurisdicción nacional. Los guardaespaldas quedaron bajo custodia de la Policía Nacional en La Paz, mientras son presentados ante los tribunales.
Los allanamientos
Eran las 6:00 de la mañana cuando las autoridades comenzaron los allanamientos simultáneos en tres lugares de Marcala, La Paz: la vivienda del médico ubicada en el barrio San Rafael, la clínica Mejía en el barrio San Miguel y un hotel.
En la vivienda del médico solo se encontraban uno de los hijos del galeno y una empleada; mientras que en la clínica, Mejía Pineda dormía junto a dos de sus cuatro guardaespaldas.
Los tres hombres fueron detenidos de inmediato. Las autoridades realizaron una inspección en todo el local encontrando un fusil de asalto AK-47, una escopeta 12, un chaleco antibalas, un yatagán, una pistola 3.80 y una 9 milímetros, las que fueron decomisadas.
Después de dos horas de operativos en la zona, los tres detenidos fueron trasladados hasta La Paz. Las armas decomisadas fueron embaladas como medios de prueba. Por orden del juez de jurisdicción nacional se dispuso trasladar al médico hacia San Pedro Sula.
Investigaciones
El sábado 21 de abril en horas de la madrugada, se registró un atentado en contra de la fiscal de Marcala, cuando una bomba de fabricación casera explotó en el garaje de la vivienda, causando solo daños materiales.
Un equipo especial de investigación fue asignado al caso. Las primeras investigaciones señalan a Mejía Pineda como autor intelectual del hecho y a sus guardaespaldas como autores materiales, según el Ministerio Público.
“Hay fuertes indicios de que el médico es el autor intelectual de haber atentado contra la fiscal Xiomara Yamileth Benítez, en venganza y represalias porque la fiscal en su oportunidad acusó a un hijo del doctor por el delito de violación”, informó Elvis Guzmán, vocero del Ministerio Público.
“Él buscaba quitar del camino a las personas que estaban involucrando a su hijo, al grado de atentar contra testigos de la fiscalía. Ahora, para borrar evidencias, trató de quitarle la vida a la fiscal como una medida de presión para que su hijo fuera absuelto de ese delito”, sostuvo Guzmán.
El vocero aseguró que en varias ocasiones el detenido amenazó a la fiscal por las acciones que en su contra se habían emprendido.
Ayer a las 5:50 se esperaba el inicio de la audiencia de declaración de imputado ante el juez de jurisdicción nacional, pero la misma se retrasó porque el imputado solicitaba un defensor privado. Después de varios minutos de espera, se inició.
El juez decretó detención judicial contra Mejía Pineda y fue remitido al centro penal de esta ciudad donde guardará prisión hasta la celebración de la audiencia inicial.
El atentado contra la fiscal
Xiomara Yamileth Benitez
se registro la madrugada del pasado
sábado
21 de abril en el barrio Campo Colón en el municipio de
Marcala, La Paz.
Por el momento el Ministerio Público ha tomado medidas de seguridad
para proteger la integridad de la acusadora y su familia.