Los israelíes sepultaron ayer a tres adolescentes que habían sido secuestrados dos semanas antes, mientras la fuerza aérea atacaba decenas de localidades en la Franja de Gaza en un aumento de la violencia tras el descubrimiento de los tres cadáveres.
Soldados israelíes mataron a tiros a un palestino en Cisjordania, donde los adolescentes desaparecieron el 12 de junio. Israel ha acusado al grupo extremista islámico Hamas del secuestro, y el primer ministro Benjamín Netanyahu advirtió que “Hamas la va a pagar”.
Centenares de personas estaban congregadas en los pueblos de los tres adolescentes, —Eyal Yifrah, de 19 años, Guilad Shaar, de 16, y Naftali Fraenkel, de 16— para servicios conmemorativos. Tendidos en camillas, los cuerpos fueron sepultados en la ciudad central de Modiin.
Los tres fueron secuestrados cuando pedían aventón desde los seminarios judíos donde estudiaban cerca de la ciudad cisjordana de Hebrón.
La campaña militar contra Hamas en Cisjordania ha estado acompañada por un aumento de los lanzamientos de cohetes desde la Franja de Gaza, controlada por la agrupación islámica. Entre la noche del lunes y las primeras horas de ayer, palestinos dispararon ocho cohetes contra Israel, dijo el ejército. La fuerza aérea israelí atacó a su vez 34 objetivos, incluyendo un complejo de Hamas, dijeron las fuerzas armadas.