El diplomático, Eduardo Martell aseguró que la Corte Internacional de Justicia de la Haya ratificó en dos ocasiones la soberanía de Honduras sobre la isla Conejo.
Martell, quien participó en la comitiva de Honduras ante la Corte Internacional, explicó que la isla Conejo pertenece al bolsón de Goascorán, 'que lo ganamos dos veces'.
Dijo que 'en 1992 la Corte reconoció la soberanía de Honduras sobre el bolsón de Goascorán al que pertenece la isla Conejo y, en 2002, El Salvador pidió la revisión de ese bolsón, que nuevamente fue ratificada la soberanía nacional'.
Añadió que hace 20 años se buscó una placa en la cresta del islote que establece que la soberanía pertenece a Honduras, desde 1954, por lo que insistió en que no hay controversia porque esta es una 'cosa juzgada'.
Martell destacó la posición geográfica de la isla, ya que desde el centro de la misma se ve la entrada de la bocana y el Puerto de La Unión, en El Salvador.
Sin embargo, señaló que una sentencia de la Corte Internacional 'se puede desnaturalizar si no hay demarcación inmediata', como lo explicó uno de los expertos que ayudó a Honduras durante el proceso de 1992.
'Un caso concreto es el de Nicaragua y Costa Rica, que no se marcó una sentencia del siglo 19', que ha generado enfrentamientos entre las dos naciones en los últimos días.
'Honduras debe acelerar un poquito el paso, para que El Salvador cumpla la obligación que establece la Corte, no solo a nivel del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, también en el Sistema de Integración de Centroamerica (Sica) y el grupo países amigos', comentó el diplomático.
En ese sentido, dijo que en el caso del Golfo de Fonseca es necesario verlo como una situación de tres países, ya que son seis mil kilómetros para la salida al océano Pacífico.
Sin embargo resaltó la posición de Honduras de actuar con sensatez, para 'desactivar cualquier acción que venga a entopercer lo que hemos ganado después de haber salido de aquella terrible época que vivió Centroamérica'.
Para el diplomático, es inconcebible que queramos repetir los enfrentamientos entre vecinos que nada abonaron a las buenas relaciones entre los países hermanos.
Aunque el ministro de Defensa de El Salvador reconoció que no tienen el equipamiento militar para defender la isla Conejo, el presidente Mauricio Funes insiste en reclamar la soberanía, pero aclaró que 'nadie habla de tambores de guerra'.
El presidente hondureño, Porfirio Lobo aseguró que Funes busca ganar popularidad con el tema de la isla Conejo.
Los reclamos salvadoreños iniciaron después del izamiento del pabellón nacional en la isla, como parte de las actividades para celebrar el mes de la patria.