Shakira y Gerard Piqué ya podrán disfrutar de su hijo Milan en casa, pues la cantante abandonó, pasadas las tres de la tarde, la clínica Teknon.
Para evitar el asedio de los medios de comunicación y curiosos que se apostaron a las afueras del lugar, la pareja abandonó la clínica por un estacionamiento alejado de donde estaba la prensa, cita la revista Hola.
Un vehículo todoterreno color negro y con los cristales oscuros, conducido por un hermano de la artista colombiana, transportó a la familia Piqué Mebarak, que no se detuvo en ningún momento y, previsiblemente, emprendieron su camino hacia el domicilio del futbolista en la localidad de Cabrils, a 25 kilómetros de Barcelona, donde la pareja se aloja hasta que terminen las obras de su nueva casa en la Ciudad Condal.
Piqué pudo acompañar a su pareja y a su hijo a la salida de la clínica, a pesar de estar concentrado con su equipo, razón por la cual el parto fue previsto para el martes 22, de esta manera podría estar con Shakira durante este importante momento.
Pese a su ausencia el pasado jueves, cuando jugó contra el Málaga, el futbolista no se ha separado de Milan y Shakira, y durante el fin de semana las visitas del central a la clínica fueron continuas.
Las familias de ambos también han estado atentas, incluso Nidia Ripoll, madre de Shakira, dijo que Milan “es un niño bello que coge el pecho muy bien y no llora mucho”. Por su parte, la madre de Gerard Piqué, Montserrat Bernabéu, aprovechó la tarde del sábado para ir a ver a su primer nieto. Muy amable con la prensa, comentó que el jugador azulgrana está feliz de ser padre y que tanto Shakira como el niño se encuentran en buen estado de salud.
Lo que no han divulgado hasta ahora ha sido una fotografía del rostro de Milan y solo se ha podido ver una foto colgada por Piqué en su cuenta de Twitter en la que se veían las piernecitas de su bebé con un calzado deportivo con su nombre grabado, bajo el epígrafe: Milan’s feet (Pies de Milan).