Tegucigalpa, Honduras.- La juventud, la belleza y el talento se apoderaron del Instituto Jesús Aguilar Paz (IJAP), que este año ha redoblado esfuerzos para deslumbrar en los desfiles patrios.
Con meses de preparación, tanto la banda como el cuadro de palillonas se presentan listos para robarse el show en cada calle que recorran el próximo 15 de septiembre hacia el Estadio Nacional de Tegucigalpa.
Las palillonas del instituto son, sin duda, uno de los atractivos más esperados. Con sus sonrisas y miradas encantadoras, cada una de las jóvenes aporta un rasgo único que las distingue: desde ojos verdes hasta rostros angelicales que transmiten dulzura.
Entre ellas destaca Yanitza Romero, capitana del grupo, quien con liderazgo y carisma guía a sus compañeras en cada presentación. A su lado, jóvenes como Maylin Amador, cuyos ojos verdes se convierten en un imán de miradas, o Génesis Abigaíl, que resalta por su rostro angelical, se roban la atención del público.
La banda, por su parte, ha demostrado ser sinónimo de disciplina y excelencia. Bajo la exigente coordinación de sus instructores, más de 40 jóvenes han dedicado meses de ensayos para lograr una perfecta sincronía entre música y coreografía.
Uno de los aspectos más admirados es la capacidad de ejecutar los instrumentos al mismo tiempo que realizan pasos de baile, mostrando destreza y energía en cada presentación.
El repertorio musical que han preparado también promete contagiar alegría, con temas como “Fiesta” de Banda Blanca, una pieza icónica que pondrá a bailar a quienes presencien su desfile.
Los instrumentos de viento, como flautas y trompetas, junto a los tambores y bombos, retumbarán en las calles, mientras el público se deja llevar por el talento de esta agrupación estudiantil.
Cada detalle ha sido afinado con dedicación: desde los pasos de las palillonas hasta la ejecución de instrumentos de la banda, todo ha sido pensado para dar un espectáculo inolvidable.
El Instituto Jesús Aguilar Paz se prepara para dejar huella en los desfiles patrios, con un cuadro de palillonas que enamora y una banda que promete poner a bailar al pueblo, demostrando que detrás de cada presentación hay horas de esfuerzo, compromiso y amor por su patria.