La mancha de tinta indeleble en sus dedos meñiques es la prueba evidente de que cientos de escolares capitalinos han acudido a las urnas a escoger a quienes deben dirigir los destinos en sus centros educativos.
Hacer fila, esperar el turno para recibir la papeleta y plasmar una marca por la planilla favorita se convirtió en una verdadera fiesta electoral.
Unos 280 mil niños de las 200 escuelas que conforman los 15 distritos a nivel de la capital participaron en la elección de los gobiernos escolares.
De ellas 150 han celebrado ya las votaciones y tienen un nuevo gobierno escolar, electo en base a la participación de menores que con acierto han dado cátedra de civismo, quizá jamás antes impartida por los políticos tradiciones. Además han demostrado capacidad en la toma de decisiones y llevaron a la silla presidencial a los mejores prospectos.
Metas definidas
Con apenas un poco más de un metro de estatura, pero con la mentalidad y madurez de un adulto, cientos de niños asumieron el reto de postularse en las planillas para participar en la contienda. El gran desafío de estos pequeños cuya inocencia se refleja en sus caritas es ser presidentes y junto a su grupo de trabajo gobernar al pueblo que habita en una república denominada Escuela.
Las planillas de los participantes estuvieron definidas en cuanto a metas y propuestas concretas, cero promesas incumplidas, apoyadas en la democracia participativa, para llegar a un denominador común: la toma de decisiones que conduzcan al mejoramiento de sus centros educativos y al bienestar de los alumnos.
De acuerdo con las autoridades de la Secretaría de Educación, los gobiernos escolares se constituyen en una estrategia para promover el desarrollo afectivo, social y moral entre los alumnos.
Asimismo, permiten formar actitudes y valores cívicos y democráticos, así como realizar actividades para lograr la convivencia, la tolerancia, la solidaridad, la cooperación, la ayuda mutua y la toma de decisiones responsables en sus centros educativos.
Julio César Alvarado, director del distrito escolar cuatro, declaró que la experiencia del sufragio a temprana edad permite a los niños tomar conciencia sobre el ejercicio de la democracia.
“En esta edad de desarrollo ellos tendrán conocimiento de qué es la democracia y del derecho que acompaña a los ciudadanos a elegir a sus autoridades”, declaró Alvarado.
Manos a la obra
Jenisse Sauceda es la nueva presidenta que dirigirá los destinos en la escuela, Japón ubicada en la colonia El Hogar.
Para dar cumplimiento a las promesas de campaña formuladas por la planilla Niños del Futuro, que la llegó al poder, se organizará una campaña de limpieza en toda la escuela.. Estas actividades las realizará con periodicidad, pues la limpieza contribuye a un ambiente saludable dentro de su centro educativo.
En la escuela Doctor Esteban Mendoza, Heydy Reyes, del movimiento Catrachitos, está lista para gestionar la ampliación de 10 minutos más al recreo, ya que actualmente solo les dan 20.
“Mis propuestas son el cuidado de las áreas verdes, también que se nos den 10 minutos más de recreo”, apuntó la menor.
En la escuela Jorge J. Larach, la planilla Triunfadores del Futuro ganó la contienda electoral y Mercy María, la pequeña gobernante, se prepara para comprar un botiquín de primeros auxilios y donar implementos deportivos a la clase de Educación Física.
Con honestidad y promesas que no se alejan de sus posibilidades, los candidatos alcanzaron la toma del poder y van en busca de generar desarrollo en sus amados centros educativos.
