Tegucigalpa, Honduras.- Las familias hondureñas continúan sufriendo las consecuencias de las lluvias que mantuvieron al país en alerta roja durante octubre, y que desencadenaron una racha de incertidumbre y desalojos forzados.
Ya que, ante los deslizamientos y destrozos en varias zonas capitalinas, unas 1,050 personas se vieron obligadas a acudir a los centros de albergue habilitados por la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC).
Sin embargo, ante la incertidumbre y la falta de soluciones concretas, muchas familias aún no saben dónde podrán reconstruir sus vidas.
Los albergues con mayor número de afectados, donde aún permanecen más de 33 familias —alrededor de 120 personas— intentan adaptarse a su nueva realidad, viviendo en salones de clases y buscando alternativas para salir adelante, incluso trabajando como barberos o estilistas dentro de los refugios.
"Anualmente, tengo que visitar estos albergues porque las lluvias siempre atentan contra mi casa, si bien la Alcaldía nos da comida y nos recibió cálidamente en los albergues, no hay nada más que me tenga aquí", aseguró una de las afectadas ubicada en el albergue de la colonia Altos del Paraíso.
Debido al descontento, EL HERALDO intentó comunicarse con autoridades municipales ante el cuestionamiento del futuro paradero de las familias afectadas, sin embargo, no hubo una respuesta concreta.
"El tema de las viviendas es difícil de contestar, porque el alcalde deberá tomar esa decisión", aseguraron las autoridades edilicias.
Bonos de ayuda
Aunque pobladores de las zonas más afectadas, como la Guillén y El Reparto, aseguraron a este rotativo que la alcaldía inició la entrega de bonos monetarios para reubicar a las familias damnificadas, el proyecto no tuvo continuidad con el paso del tiempo.
Bonos que según los afectados contienen hasta nueve mil lempiras destinados al pago de alquiler para las personas damnificadas
"Hace años pasó exactamente lo mismo, la Alcaldía solo dio el bono por dos meses, mientras que las promesas de reubicación quedaron en el aire, hasta la fecha nos preguntamos donde están las casas que nos prometieron", aseguró Mario Álvarez, poblador afectado de la zona cero.
Mano solidaria
En medio de su situación, los afectados reconocieron la labor de la Alcaldía al habilitar espacios de acobijo, debida alimentación y cuidados sanitarios.
"Sí, nos han atendido muy bien, cuando ingresamos aquí nos recibieron con colchones, brazadas, una paila de comida", aseguró Elisa Flores, que permanece en los albergues hace más de un mes.
Asimismo, las personas afectadas de la colonia Guillén, ubicados en la escuela Agustín Alonzo piden a la población una mano solidaria ante su situación de vulnerabilidad.
"Quienes tengan el corazón, pueden donar cobijas, abrigos, leche de bebé, pañales y comida en general. Los adultos mayores y menores de edad son prioridad para nosotros", explicaron.
Incidencias
Las lluvias que azotaron al país y debilitaron considerablemente el Distrito Central dejaron pérdidas materiales de hasta 900 millones de lempiras, más de 1,050 personas evacuadas de sus hogares y 15 fallecidos.