TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Sandra de Barahona no logra entender por qué la vida de su hijo se redujo al valor de un carro, cuando el pasado lunes 30 de enero de 2023 fue asesinado antes de ingresar con su vehículo a su casa de habitación en la colonia Kennedy de Tegucigalpa, capital de Honduras.
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El joven Carlos Gerardo Barahona, quien laboraba como productor de televisión en Suyapa Medios y por las noches se reunía con sus amigos para jugar partidos de fútbol, fue ultimado a balazos por personas desconocidas que se llevaron su vehículo cuando él volvía de uno de esos encuentros deportivos.
El cuerpo de Carlos quedó muy cerca de su vivienda y su madre todavía recuerda el ensordecedor sonido de las detonaciones que le arrebataron a su vástago.
“Nosotras estábamos dormidas y cuando oí los disparos los sentí en el oído y yo le dije: ‘¡Hija, tu hermano!’ y ella me dijo: ‘No, mamá’ -a manera de tranquilizarla- pero lo llamó (por teléfono) y no le contestó”, contó la madre, sin dejar de llorar.
La mujer, se presentó a la morgue del Ministerio Público para reclamar el cuerpo de su hijo, quien fue recordado por amigos y compañeros de trabajo como una persona jovial, trabajadora y sobre todo, entregada a su familia.
Esa versión también fue confirmada por Sandra, quien veía con dolor a una reportera cuando le dijo: “Esas personas se llevaron la mitad de mi vida, nos dejaron huérfanas a mi hija y a mí porque mi hijo era mi ayuda idónea”.
“No me van a devolver a mi niño, me lo mataron cruelmente por robarle el carro, se hubieran llevado el carro pero no me le hubieran quitado la vida al muchacho”, prosiguió.
Claman justicia por Carlos Gerardo
Las personas cercanas a la víctima han pedido que se investigue pronto la identidad y el paradero de los responsables y que se les aplique un castigo ejemplar.
El miércoles por la noche, el vehículo que le fue arrebatado se encontró un solar baldío al norte de la ciudad y ahora se encuentra bajo resguardo policial para encontrar mayores pistas.
“El vehículo fue encontrado gracias a una saturación de los elementos de la unidad metropolitana #2 en el sector de la salida al norte, cerca de la residencial San Miguel Arcángel”, detalló el comisionado de Policía, Miguel Martínez Madrid.
Pero aunque espera que los asesinos de su hijo paguen la condena que merecen, a doña Suyapa nada la consuela, pues no volverá a ver el rostro de su hijo.
“Con que agarren las personas que lo mataron nadie le va a devolver la vida a mi criatura... Nadie me lo va a devolver”, lamentó amargamente.
