Sucesos

Por despecho habrían asesinado a hermanos en Copán, según una de las hipótesis

Los menores fueron encontrados el pasado miércoles 15 de junio ultimados en la aldea de Río Lindo, del municipio del Paraíso, Copán
20.06.2022

SAN PEDRO SULA.- Las autoridades policiales revelaron, gracias a una declaración de un testigo protegido, que el homicida de Hilda Suyapa Orellana León y Misael Orellana León los asesinó porque la menor se negó a vivir con él.

La policía informó que luego de realizar indagaciones encontraron un testigo en la aldea El Playón del municipio de Paraíso, Copán.

Según la declaración que se tomaron del testigo protegido, “el señor Anselmo Murillo Landaverde a eso de las 11:00 de la mañana le manifestó que le había quitado la vida a dos niños de nombre Hilda Suyapa (14) y Misael José (11)”.

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En la declaración también se especificó que los hermanos habían sido engañados por el hombre quien les hizo creer que tenía dos loros y que se los regalaría, pero que tenían que ir a su hacienda ubicada en el sector de Los Limones para obtenerlos. En ese lugar, Anselmo Murillo le habría dicho a la pequeña de 14 años que tenía que irse a vivir con él y ella se negó.

Tras la indisposición de Hilda, el homicida dijo que “si no se iba con él que hasta ahí llegaba su vida” y detonó su arma en dos ocasiones contra la niña y una vez contra Misael.

El testigo también declaró que observó el miércoles 15 de junio a cuatro hombres desconocidos llegar a la casa de Anselmo Murillo, quienes se lo llevaron sin rumbo fijo.

Ese mismo día en horas de la noche le fue informado a la mamá de Anselmo Murillo que en el caserío Los Limones, aldea de Los Amates, municipio de Izabal, en Guatemala, había sido encontrado el cuerpo de su hijo.

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El Crimen

Los pequeños Orellana León desaparecieron el sábado 11 de junio y tras la búsqueda de sus familiares fueron hallados muertos el miércoles 15 por la tarde. Sus cuerpos presentaban heridas de arma de fuego y el de Hilda signos de un posible abuso sexual.

Su padre, Pablo Orellana, quien acudió el jueves hasta la morgue de San Pedro Sula para reclamar los cadáveres de sus hijos, relató su doloroso testimonio a los medios de comunicación y se culpó por haber tenido que dejar solos a los niños.

“Yo tuve la culpa por dejarlos solos. A uno nunca se le viene a la cabeza que puede pasar algo. Yo bien echo de ver que tuve la culpa porque los dejé solos”, dijo.

Sobre quién podría estar involucrado en el doble crimen, aseguró no tener idea, pues su familia no tiene problemas ni enemistad con nadie.

Orellana sí se refirió a personas que “querían” pretender a su hija, de apenas 14 años de edad, pero no especificó de quiénes se trata.

“Eran muchachos, había veces que me decían ‘suegro’, pero yo me lo tomaba como broma. Yo nunca pensé que le pasara eso a mi hija, nunca pensé (...). Tal vez ella no quería ni a uno ni a otro y por eso cometieron ese error”, explicó.

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