Un equipo de la Unidad Tigres de la Policía Nacional, al mando de un oficial, está asignado las 24 horas a la seguridad del módulo donde está alojado el presunto narcotraficante Carlos Arnoldo Lobo Alemán, alias “El Negro” Lobo, en la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto.
El supuesto capo de la droga fue trasladado al principal centro penitenciario la tarde del pasado viernes en un helicóptero del Ejército y encerrado en el módulo de Segregación Administrativa, más conocido como Cárcel de Máxima Seguridad.
El próximo 10 de abril se realizará la audiencia inicial donde se determinará si es extraditado o no a Estados Unidos a solicitud del gobierno del país del norte para que sea juzgado por delitos relacionados con la narcoactividad.
Mientras tanto, la Policía mantiene una estricta vigilancia tanto en el interior como en la periferia del módulo de máxima seguridad.
Custodiado por Tigres
Un oficial de policía asignado al Instituto Nacional Penitenciario (INP) reveló que desde el pasado viernes un contingente de la Unidad Tigres fue asignado el cuidado de Lobo.
Lobo Alemán fue capturado el pasado jueves en la colonia Tara de San Pedro Sula en acato a una orden judicial por delitos relacionados con la actividad de narcotráfico.
A partir de la tarde del viernes fue un comisario de policía el que estuvo al mando de un fuerte contingente de la unidad élite que está a cargo de la seguridad interna en la cárcel de Támara.
Mientras tanto, el perímetro está a cargo de las Fuerzas Armadas en los tres anillos de seguridad que hasta la fecha se mantienen en el reclusorio ubicado en el valle de Támara.
El oficial reveló que el sábado tomó el turno un subcomisionado del Comando de Operaciones Especiales (Cobras) en una misión que, por lo general, ha sido asignada a personal de la escala básica de la Policía Penitenciaria.
Según una fuente, la instrucción de los altos mandos de la Policía Nacional es que sea un oficial el que esté frente al grupo encargado de la custodia y que sea él responsable de cualquier irregularidad que pudiera presentarse.
A raíz del traslado de “El Negro” Lobo el ingreso de la prensa a las instalaciones es mas restringido, por lo que se tienen que esperar varios minutos en los retenes para que las autoridades den la autorización. El informante confió que, de igual manera, se han implementado otras medidas de seguridad a nivel de todo el reclusorio debido a información de inteligencia que ha circulado sobre posibles intentos de motín por parte de la población penitenciaria.
