Dos bebés que nacieron el miércoles en la sala de labor y parto del Materno Infantil en el Hospital Escuela Universitario (HEU, murieron poco después de nacer.
Los recién nacidos compartían un mismo corazón lo que habría sido la principal causa de su deceso.
A penas unos minutos más de una hora estuvieron en este mundo las dos criaturas de una joven madre hondureña identificada como Maryori Johana Contreras.
El nacimiento de los siameses varones, unidos por el tórax y la pelvis fue asistido a través de cesárea.
El informe médico establece que los bebes compartían corazón, además presentaban malformaciones múltiples y estaban deprimidos' , lo que hacía escasa las posibilidad de vida.
La familia de la madre, de unos 20 años, se mostró sorprendida al conocer que a lo largo de las 38 semanas y media de embarazo, el médico que llevaba el control prenatal en Guaimaca, Francisco Morazán, jamás les dijo que nacerían siameses.
El acongojado padre aseguró que 'el médico en donde vivimos, nos dijo que en los ultrasonidos se miraba que era un varón y nos daba como fecha de parto el 30 de junio'.
La joven madre llegó a eso de las 6:20 de la mañana de ayer para ponerse en manos de los especialistas que de inmediato asistieron el alumbramiento poco frecuente.
Un hermano de Contreras reveló que en su familia hay precedente de nacimientos de gemelos.
Los siameses fueron entregados a la familia en la morgue del nosocomio y trasladados a Guaimaca donde serán sepultados.