Tegucigalpa, Honduras.- La decisión de Honduras de rechazar un préstamo de 39 millones de euros —más de 1,109 millones de lempiras— del gobierno de Francia ha levantado polémica y preocupación en el sector salud.
Para muchos, se trata de una oportunidad perdida para modernizar quirófanos clave en los hospitales públicos y remodelar los quirófanos destinados a trasplantes renales del Hospital Escuela y del Mario Catarino Rivas en San Pedro Sula.
El convenio también establecía el equipamiento de los quirófanos y el entrenamiento de las personas para el mantenimiento del mismo.
El diputado del Partido Salvador de Honduras (PSH), Carlos Umaña, explicó que el gobierno hondureño solicitó incluir a otra empresa en la ejecución del proyecto, condición que no fue aceptada por Francia.
"Esto no lo permitió el Gobierno francés porque este tipo de ayuda es llave en mano. No puede haber ningún nacional pretendiendo administrar ese dinero, por obvias razones que han sucedido en el pasado”, declaró el médico en entrevista con Radio Cadena Voces.
Añadió que, ante la negativa francesa a la imposición de incluir otra compañía, Sesal optó por no continuar con el proceso de apoyo.
El congresista detalló que el proyecto contemplaba no solo la remodelación de los quirófanos del Hospital Escuela y del Mario Catarino Rivas, en San Pedro Sula, sino también su equipamiento y el entrenamiento del personal para su mantenimiento.
Según Umaña, la Secretaría de Salud decidió ejecutar la obra a través de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops).
“Si se compara lo que hará Unops con 9.5 millones de dólares, frente a los 39 millones de euros, es lógico que no será lo mismo. La inversión del Gobierno es dos veces menor, por lo tanto, dudo que la remodelación sea de la misma magnitud. Quienes pierden son los pacientes”, expresó.
A criterio del diputado, la decisión demuestra la falta de seriedad de las autoridades sanitarias.
Ante las críticas, la Sesal explicó mediante videos en redes sociales que la adenda con Unops permitirá renovar y equipar los quirófanos de ambos hospitales con fondos nacionales, sin contraer deuda externa.
La ministra de Salud, Carla Paredes, indicó que una de las razones para rechazar el préstamo fue la condición impuesta por Francia de contratar a una empresa específica para la ejecución del proyecto.
“Somos un país con dignidad. No llenaba las expectativas que el país necesita, por eso se tomó la decisión. No había nada formal, solo pláticas; jamás llegó al Congreso Nacional”, sostuvo.
En recientes declaraciones, la funcionaria reiteró que las conversaciones con Francia “no pasaron de simples pláticas” y que la propuesta no fue presentada de manera oficial ante el Legislativo.