Los países del G-16 se han comprometido a apoyar a Honduras en los procesos de depuración de la Policía y a las instancias que sean creadas para ejercer más control sobre los operadores de justicia.
Hernández y la junta directiva del Congreso se han reunido con los embajadores de ese grupo de países, cita en la que se discutió el tema de la seguridad, ya que existe preocupación por los altos índices de inseguridad que existen en Honduras.
El embajador de España, Luis Belzuz de los Ríos, dijo que existe preocupación a nivel de los gobiernos y del parlamento europeo, y sobre todo en los grupos que apoyan la cooperación a las naciones centroamericanas, particularmente a Honduras.
Hemos venido aquí, en primer lugar, para expresar nuestro apoyo personal al presidente del Congreso Nacional y en segundo lugar a ponernos a disposición para colaborar en lo que podamos, a fin de que se haga lo que se tiene que hacer, expresó el embajador.
Indicó que la cooperación no puede ser insensible a lo que ocurre en Honduras, en donde se tiene que reevaluar la situación para ayudar al Estado y sus instituciones.
El diplomático español destacó que la ayuda de los países cooperantes tiene que ser replanteada por los hechos que han sucedido e indicó que esta situación no solo la ven los embajadores, sino también los representantes de los bancos, la opinión pública en nuestros países, el Parlamento Europeo y los partidos políticos.
Lo que hacemos es abrir las puertas del G-16 no para ayudar a los malos, sino para ayudar al Estado hondureño en esta cruzada para fortalecer a las instituciones del Estado en su lucha contra la inseguridad.
En relación a lo expresado por el embajador, el presidente del CN, Juan Orlando Hernández, indicó que tiene que haber un replanteamiento y por esa razón se ha solicitado la ayuda de los países cooperantes consistente en apoyo técnico y logístico para la institución que se encargará de supervisar el accionar de la Policía.
Hernández afirmó que la idea es hacer efectiva la depuración de la Policía y esto significa tener los instrumentos que permitan enviar a los tribunales con las pruebas del caso a quienes han hecho mal uso del uniforme, traicionando la confianza del pueblo hondureño.
Hernández manifestó que con el apoyo internacional no se dará marcha atrás al proceso de la depuración de la Policía; se están tomando decisiones y ahora lo que vamos a exigir son resultados.
En relación al apoyo concreto que dará el G-16, el embajador de los Ríos, afirmó que ya se da ayuda con programas específicos y mientras las comisiones técnicas trabajan 'nosotros estaremos al corriente de los contenidos para poder estar listo para las posibles peticiones bilaterales que se puedan hacer'.
Subrayó que si el G-16 habla del replanteamiento de la ayuda, es porque se tiene fe en Honduras.
'Si estamos aquí para ponernos en servicio de las instituciones es porque estamos convencidos de que la situación tiene salida, si no fuera así no tendría sentido este esfuerzo que estamos haciendo', dijo.
El diplomático destacó la relación de amistad que le une con la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, quien impulsa un gran movimiento en pro de la depuración policial. Este movimiento es impulsado por Castellanos, quien es víctima de la violencia porque policías corruptos asesinaron a su hijo y a su compañero de universidad el pasado 22 de octubre.
El diplomático también reconoció haber tenido amistad con la abogada Judith Alemán, asesinada el pasado lunes. Indicó que la semana, ella incluso estuvo en su casa para departir alimentos.
Cuestionan abuso de cadenas de radio y tv con fines políticos
El presidente del Congreso Nacional, Juan Orlando Hernández, reiteró ayer en cadena nacional de radio y televisión la intención de crear una superintendencia para ejercer control efectivo sobre los operadores de justicia.
Esta práctica, que se vuelve más común entre quienes ostentan el poder, fue cuestionada ayer por diferentes sectores que consideran que Hernández pretende politizar el tema de la seguridad. Según los analistas, no había necesidad de programar una cadena de radio y televisión para reiterar anuncios.
En el mensaje, Hernández reiteró que después de crear la tasa de seguridad, 'también es necesario vigorizar los controles que auditen su accionar (de los operadores de justicia) para lograr los resultados que la sociedad demanda'. Esta tasa o 'paquetazo' de seguridad, aprobado por Juan Orlando Hernández, tiene como fin entregar unos 3,500 millones de lempiras a una Policía corrupta y no depurada.
¿Cómo podemos garantizar que estos fondos se van a utilizar bien?, dijo con relación a la tasa de seguridad y a renglón seguido se contestó: 'con una serie de iniciativas de ley, complementarias que comenzaron a aprobarse la semana pasada y que continuaremos aprobando en los próximos días'.
Entre estas se encuentra la ley que crea la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial, que permitió separar la Oficina de Asuntos Internos de la Policía, para crear un ente que pueda revisar de manera independiente la actuación de los policías; sin ninguna relación de subordinación con la oficialidad.