Tegucigalpa, Honduras.- En masacres, veredas, cantinas, fiestas y hasta dentro de sus casas, cientos de mujeres han sido víctimas de la violencia que sigue golpeando sin piedad al país
Honorina Rodríguez, defensora de las mujeres en Honduras, lamentó este domingo que a más de 265 féminas les quitaron la vida de forma violenta, “y seguimos pidiendo, justicia para las mujeres, ni una menos”, demandó.
Llamó a las autoridades a redoblar esfuerzos, en especial ahora que Honduras tendrá un nuevo gobierno, encabezado por el presidente electo, Nasry “Tito” Asfura, y un nuevo Congreso Nacional, aunque muchos de los diputados están siendo reelectos.
Consideró que toda la institucionalidad debe hacer un abordaje integral para la prevención de los feminicidios y frenar la muerte violenta de mujeres en el país, mientras que la población hondureña no debe normalizar este tipo de ataque contra féminas.
Al mismo tiempo llamó a las mismas mujeres a denunciar todo tipo de amenazas o ataques para poder salvar sus vidas, “aquí seguimos con nuestra voz, nuestra palabra diciendo, ni una menos, alto al feminicidio”.
De acuerdo con el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), alrededor de 900 mujeres perdieron la vida violentamente en Honduras desde que se puso en vigencia el estado de excepción, el 6 de diciembre del 2022, es decir, una víctima cada 29 horas.
Aurora Rueda, coordinadora de la Defensoría de la Mujer del Conadeh, explicó que a pesar de estar en un estado de excepción desde hace aproximadamente 3 años, no se ha reducido el índice de muertes violentas de mujeres.
Señaló que el alto índice de impunidad en un alto porcentaje de los casos genera la repetición crónica de hechos y el agravamiento de la situación, ya que no hay efectos disuasivos sobre los agresores.