Las vacaciones de Semana Santa tocaron las puertas de los capitalinos con los bolsillos vacíos, pues el período de verano llegó una semana antes de la fecha de pago.
Por los altos costos de la canasta básica y las constantes alzas a los precios de los combustibles, muchos creerían que los sitios turísticos estarían desérticos, sin embargo, la crisis económica y el alto costo de la vida no frenarán las intenciones de miles de ciudadanos para viajar al interior del país.
Según proyecciones de la Unidad de Turismo de la Alcaldía, entre el 50 y 70 por ciento de la población abandona la metrópolis durante la Semana Mayor, lo que equivale entre unas 800 mil y un millón personas.
Aunque muchos pronosticaban un bajo movimiento de turistas, la percepción quedó totalmente descartada con el masivo éxodo de veraneantes desarrollado en los primeros días de Semana Santa.
El desplazamiento del fin de semana anterior fue tal, que en las salidas de la capital el tráfico se paralizó por horas y las colas se extendieron en varios kilómetros.
Para el caso, solo el domingo pasado -considerado un día de poco movimiento-, cada 10 minutos un promedio de 60 vehículos salían por la carretera del norte, según estimaciones de Turismo.
En otras palabras, al menos 360 automotores por hora abandonaban la ciudad por ese sector.
Cabe señalar que en cada automóvil circulan un promedio de cinco personas, lo que indica que por esa zona transitaron unos 1,800 ciudadanos cada hora.
Esa tendencia se mantuvo con el traslado de 70 vehículos por hora en las principales salidas de la ciudad.
El frenesí por el mar, sol y arena, incluso, hizo que 20 personas fueran retornadas a la ciudad por viajar de pie en una unidad del transporte en la salida al sur.
Al operador de la empresa Los Costeños se le interpuso una multa de 800 lempiras más 200 lempiras por cada pasajero parado.
Asimismo, los centros de veraneo y las empresas del transporte interurbano reportan la típica afluencia alta de clientes.
Rubén Fuentes, gerente administrativo del balneario Sol y Arena, al norte de la capital, indicó que por día esperan recibir entre 1,500 a 2,000 personas.
“En el 2013 estamos seguros que el movimiento de veraneantes aumentará, incluso desde hace una semana empezamos a registrar un prematuro incremento”, consideró.
Por su parte, Lisandro Godoy, supervisor de la empresa Discovery, con destino a Juticalpa y Catacamas, confirmó el masivo éxodo de capitalinos.
Para el caso, la compañía de transporte pasó de realizar 10 viajes diarios en temporada normal a 25 durante Semana Santa.
Cabe señalar que cada unidad tiene una capacidad de 60 pasajeros, por lo que cerca 1,500 capitalinos viajan diariamente en dirección a Olancho.
Bajan excursiones
En contraste con la masiva salida de viajeros, están las bajas contrataciones de transporte, por lo que el servicio se verá afectado, vaticinaron empresarios del rubro.
A la fecha, según la Dirección Nacional de Tránsito (DNT), apenas unos 800 buses han sido autorizados para salir en excursiones, contrario a las 1,700 unidades que el año anterior estaban registradas.
Sin embargo, como explicación de estos contrastes, no se descarta que -como es costumbre- los operadores y transportistas han dejado para última hora las revisiones físico-mecánicas.
Es por esta razón que el titular de esta dependencia del Estado, Blas Ramos, manifestó que se espera que en los próximos días hayan más autorizaciones de viaje.
Por su parte, Jorge Lanza, empresario del transporte, expresó que es lamentable la pésima situación económica que se está viviendo en la capital.
Aunque no detalló el número de unidades que posee, Lanza indicó que “en otros años para esta temporada ya tenía el 85 por ciento de la flota contratada, este año estoy asustado, no tengo ni un viaje”, afirmó.
Lanza también argumentó que la enorme cantidad de competencia del transporte que ha surgido en los últimos meses puede ser la causa de la ausencia de viajeros
Según la Alcaldía Municipal, en el municipio funcionan 44 terminales del transporte interurbano con diferentes destinos.
En otros años la competencia en estos días es alta, incluso las 1,500 unidades del servicio interurbano que operan en la capital no se dan abasto con la demanda de los usuarios.
Para cubrir este fenómeno migratorio, propio de la temporada, ha sido necesario el ingreso de 800 a 1,000 unidades de las rutas urbanas, pero este año existe un descenso.
Otro de los factores que preocupa a los viajeros en la presente época son los precios del pasaje regular.
En un recorrido realizado por EL HERALDO, los empresarios, despachadores y usuarios sostuvieron que las tarifas se mantienen.
El último incremento, correspondiente al 10 por ciento, se efectuó en el 2012 antes de Semana de Santa.
Sin embargo, el servicio ejecutivo o rapidito, que cubre la demanda extraordinaria, cobra tarifas más altas que el tradicional, revelaron los usuarios.
Los precios, según sondeos de EL HERALDO, aumentan entre el 20 y 30 por ciento en el transporte rapidito.