Tegucigalpa, Honduras.- Entre la maleza y el abandono permanecen las viviendas del proyecto habitacional Villa Solidaridad, que debía albergar a las familias afectadas por el deslizamiento de tierra en la colonia Guillén, ocurrido en septiembre de 2022.
Yency Carolina Núñez recuerda con tristeza aquella madrugada del 15 de septiembre de 2022, cuando tuvo que evacuar junto a su madre e hijos hacia un albergue, luego del colapso de su vivienda.
“Créame que son momentos difíciles; nadie quiere dejar su casa. Dígamelo a mí, que tuve que salir con mi madre a un albergue”, relató Núñez, quien ahora reside en una casa prestada en el sector de El Manguito, cercano a la zona de riesgo.
La afectada explicó que la vivienda actual se encuentra en una zona considerada parte de la “zona cero”, pero el deslizamiento no ha avanzado hasta ese punto.
Núñez recordó que, en 2022, las autoridades de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) prometieron una vivienda digna para los afectados. “Nos prometieron la reubicación en Villa Solidaridad y tres años después no hay nada”, lamentó la entrevistada.
Y es que el proyecto quedó totalmente abandonado, con las paredes sin concluir y apenas dos casas terminadas de las 105 que prometió el alcalde Jorge Aldana en el primer bloque.
Las demás viviendas están cubiertas de maleza, evidenciando el olvido de la construcción.
Algunas casas apenas tienen las paredes levantadas, otras presentan techos inconclusos, mientras que la mayoría del terreno solo fue preparado con el terraplén para iniciar las construcciones.
De las 105 casas que prometió el alcalde capitalino Jorge Aldana hace tres años, solo dos apenas están terminadas.
Doña Gloria Flores, por su parte, tiene más de 25 días de estar albergada en el centro de educación básica Agustín Alonso.
“Mi casa tiene daños en las paredes, pero tengo que regresar porque no tengo a dónde ir y estas autoridades desde hace tres años prometieron limpiar la zona para evitar estos daños”, recordó.
Y es que doña Gloria forma parte de los evacuados que sufrieron daños en sus casas por las fuertes lluvias del pasado mes de octubre.
La entrevistada lamentó que las autoridades solo se acuerdan por un momento y llegan con promesas y discursos.
“Nosotros también nos prometieron, pero se olvidan de nuestras necesidades. Lo que queremos es que quiten esas cantidades de tierra que prometieron limpiar para salvar nuestras casas”, solicitó en entrevista.
Doña Gloria se encontraba junto a más de 100 personas en el centro educativo Alonso Zuazo, ubicada en el barrio el Machén, que actualmente funciona como albergue.
El pasado 23 de octubre, Julio Quiñones, coordinador del Programa de Adaptación al Cambio Climático de la comuna capitalina, informó que hay posibilidades de que las familias afectadas en ese mes de octubre puedan ser reubicadas en Villa Solidaridad.
Sin embargo, mencionó que tendrían que evaluar si el espacio es suficiente para poder ubicar a las familias afectadas este 2025.
Por otra parte, informó que se cambió de empresa constructora, ya que la anterior había quedado mal con los avances del proyecto de Villa Solidaridad.
En las últimas tormentas de octubre, 40 familias se vieron obligadas a salir de Cerrito Blanco y El Reparto, mientras que 17 casas fueron totalmente destruidas por los movimientos de tierra que presentaba el lugar.