Tegucigalpa, Honduras
Aturdida y con lágrimas a flor de piel por lo sucedido, llegó a la morgue del Ministerio Público Yessenia Amaya.
No es para menos. Su hija de tan solo 17 meses, Stefani Gissell Amaya Molina, murió después de tomar una pastilla contra la diarrea, que fue suministrada por su propia madre.
Con el pesar evidente por la acción que había cometido, en el intento de curar a su hija, relató que le dio el medicamento para contener el problema gastrointestinal de su bebé.
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“Tenía diarrea desde el día anterior (miércoles) y este jueves como a las 7:20 de la mañana decidí darle la pastilla, pero se me puso morada casi al instante”, confesó la angustiada mamá.
En el afán de buscar una solución a lo que estaba pasando, llevó a la infante al centro de salud de la aldea Yaguacire, donde residen, pero en el sanatorio no se encontraba el médico, por lo que decidió traerla hasta la capital.
Con voz baja y muy adolorida, contó que “en el camino se me murió, ya no pudo la niña”.
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