San Pedro Sula, Honduras.- Seis de los siete policías de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) acusados por el robo de 14 millones de lempiras, se declararon culpables en una audiencia de procedimiento abreviado ante la comisión de delitos.
Los policías culpables son Bryan Emmanuel Mejía Vásquez, Enar Moisés Ramos Ochoa, Emerson Gabriel Castillo Martínez, Omar Daniel Paguaga Sevilla, Luis Gustavo Martínez Estrada y Félix Manuel Hernández Bonilla.
El jueves 22 de mayo los imputados se presentaron al Juzgado de Letras Penal con Competencia Nacional en Materia de la Criminalidad Organizada, Medio Ambiente y Corrupción a la audiencia de procedimiento abreviado, luego que fuera solicitado por sus abogados.
Pero no fueron acusados solo por un delito, sino por al menos cuatro más, como privación injusta de la libertad, robo con fuerza agravado, abuso de autoridad en perjuicio de la víctima y allanamiento de morada por funcionario público.
Por su parte, Rigoberto Ramos, el séptimo acusado, no aceptó su culpabilidad y hace unos días asistió a su audiencia preliminar; el resultado se conocerá próximamente.
Las víctimas de estos hechos son el prestamista Hilton Velásquez Fúnez y los trabajadores que fueron incriminados, Maynor Maudiel Sabillón Fernández y Eduardo Nóe Quintanilla Amador; la inviolabilidad domiciliaria y el Estado de Honduras.
Enar Ramos, Bryan Mejía, Omar Paguaga, Emerson Castillo y Luis Martínez, cinco de los siete policías señalados, aceptaron los cargos de falsificación de documentos.
Por su parte, Omar Paguaga y Emerson Castillo, también aceptaron los cargos por falso testimonio en perjuicio de la fe pública del Estado de Honduras y serán sentenciados de 8 a 12 años de prisión.
¿Qué robaron los policías que se declararon culpables?
Los siete policías de la DPI fueron capturados el 26 de enero del año anterior, debido a que el 29 de diciembre de 2023 entraron sin autorización, simulando un allanamiento, a la casa del prestamista Hilton Velásquez, ubicada en la residencial Los Alpes de la ciudad de San Pedro Sula, en el departamento de Cortés, al norte de Honduras.
Según la denuncia, los acusados forzaron la entrada, robaron un aproximado de 14 millones de lempiras que se encontraba en una caja fuerte, 240 tarjetas de crédito pertenecientes a clientes de una empresa, relojes, lociones y un maletín que contenía 460 mil lempiras.
Dos trabajadores del prestamista también se vieron afectados por este crimen, ya que los policías le 'sembraron' (colocaron) pruebas para incriminarlos por tráfico de drogas y tenencia ilegal de armas.
Ambos fueron acusados ante los juzgados, pero quedaron libres en la audiencia inicial porque descubrieron la falsedad de las pruebas.
