Tras una nutrida balacera entre integrantes de unidades especiales de la Policía Nacional cayó abatido a balazos José Gerónimo Espinoza Zúniga, alias “El Chombo”, de 23 años.
A la 1:00 de la tarde del juevez, Espinoza Zúniga salió de una cueva ubicada en la aldea La Laguna, del municipio de San Luis, Comayagua, y se enfrentó a los miembros de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas y agentes de unidades especiales, quienes lo buscaban afanosamente.
En el acto fue alcanzado por los disparos desplomándose sin vida. “El Chombo” era considerado como uno de los principales cabecillas de la banda Los Espinoza, quien tenía en su poder armas de grueso calibre, entre ellas un fusil AK-47 con un dispositivo adaptado con mira telescópica y una pistola calibre nueve milímetros.
A causa del intercambio de disparos, un agente de la Policía Nacional resultó herido en su pierna izquierda, por lo que fue trasladado a un centro asistencial de Comayagua.
Según informes de inteligencia, la banda es la responsable de actos en contra de la población de varios municipios de Comayagua, tales como sicariato, secuestros, robo y extorsión.
El comisionado Ramón Antonio Sabillón Pineda, director de la Policía Nacional, explicó que en el marco de la Operación Morazán que realiza la Fuerza de Seguridad Institucional (Fusina), cayó abatido uno de los principales jefes de la peligrosa banda, cuya mentalidad es “morirse antes de entregarse”.
“Estamos ante una situación atípica de lo que es el crimen organizado, porque estas personas tienen un lema que dice ‘aquí nací, aquí crecí y aquí voy a morir’, que es una determinación de no dejarse capturar jamás”, dijo Sabillón Pineda.
El jefe policial manifestó que la agrupación tiene “una metodología con tácticas especiales de guerra, porque varios son exmilitares con algún entrenamiento”.
“Esta banda usa armas con calidad desproporcional al Estado. ¿Por qué digo esto? Porque la AK-47 tiene un poder destructivo, mediante una acción puede disparar treinta proyectiles por minuto y en relación al calibre 7.62, lo que indica que hay una potencia destructora de cada proyectil”, prosiguió el funcionario.
Además de eso, consideró que las armas, por su rapidez, pueden entablar un poder de combate más fuerte que las armas de la Policía Nacional ya que estas son “tiro a tiro”.
“En esta acción atípica se ve una zona ocupada porque actúa un grupo distinto a lo que de manera común conocemos como crimen organizado y tienen características de una guerrilla”, enfatizó Sabillón Pineda.
“Estamos comprometidos en llevar paz y seguridad y reafirmamos el fuerte compromiso del gobierno de la República a través de sus instituciones en procurar un ambiente de paz para todos los habitantes de la zona, sin distingos de ninguna naturaleza”.
“En la zona de forma normal hay una disposición de 20 elementos que realizan patrullajes, pero al ver esta situación caótica y de alto riesgo para la población, decidimos enviar un contingente de 85 policías, y otro número similar de las fuerzas especiales del Ejército”, agregó.
Hasta el momento, suman siete los integrantes de la banda de 'Los Espinoza' que han perdido la vida en enfrentamientos con la Policía, mientras seis policías han sido heridos.
La célula delincuencial porta fusiles AK-47 con miras telescópicas adaptadas, pistolas 9 mm y todo un arsenal, así como teléfonos satelitales.
Según la Policía, los criminales que aún se encuentran prófugos, entre ellos dos mujeres y dos hombres, todos hermanos, poseen formación paramilitar y utilizar uniformes de las Fuerzas Armadas 'para confundirlo con la naturaleza'.
Los prófugos fueron identificados como: Santos Isabel Espinoza Baires (35), alias “Chabelo”; Walter Alexander Espinoza Zúniga (22), alias “El Militar”; Darwin Rafael Espinoza Zúniga (25), alias “El Cholo”; Junia Espinoza Zúniga (27) y Santos Priscila Espinoza Zúniga (38).
La Secretaría de Seguridad ofrece una recompensa de 250 mil lempiras
a quien proporcione información que ayude a la captura de cada uno de los fugitivos.