El significado del nacimiento navideño: origen e historia
Presente en hogares, iglesias y plazas, el nacimiento de Navidad es una de las tradiciones más antiguas y universales del cristianismo. Más allá de su valor religioso, el belén resume siglos de historia, arte y cultura popular, desde sus orígenes medievales hasta su expansión por Europa y América
- Actualizado: 23 de diciembre de 2025 a las 11:20
Todo comenzó en 1223, cuando San Francisco de Asís recreó por primera vez el nacimiento de Jesús en la aldea italiana de Greccio.
Aquella escena sencilla buscaba que el pueblo entendiera el mensaje cristiano a través de imágenes cercanas.
Antes de ese gesto, el arte y la literatura ya habían insinuado la Natividad en templos y manuscritos.
En el siglo V, Roma acogió una imitación de la gruta de Belén por orden del papa Sixto III.
El belén nació en una Iglesia que empezaba a salir de los monasterios para encontrarse con la gente.
Los frailes franciscanos difundieron rápidamente esta forma de enseñar la Navidad.
Las clarisas aportaron ternura y detalle, vistiendo al Niño Jesús con ropas hechas a mano.
Italia se convirtió en el primer gran escenario del belenismo, con Nápoles como referente.
Durante siglos, estas representaciones convivieron con críticas y miradas hostiles.
El Renacimiento transformó el belén en una expresión artística cada vez más elaborada.
La tradición cruzó fronteras y llegó a América de la mano de misioneros europeos.
Cada país adaptó el nacimiento a su paisaje y cultura, dando vida a belenes únicos y reconocibles.