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EEUU y México infligen “abusos” a los migrantes en la frontera, dice HRW

Las solicitudes del estatus de refugiado y las detenciones de migrantes en México “han aumentado drásticamente” a medida que el presidente estadounidense Joe Biden “sigue restringiendo el acceso al asilo en la frontera sur”, alertó la oenegé
06.06.2022

LOS ÁNGELES, ESTADOS UNIDOS.-Los migrantes que entran en territorio mexicano por la frontera sur sufren “abusos” por las medidas adoptadas por México y Washington para impedirles entrar en Estados Unidos, denunció este lunes Human Rights Watch, coincidiendo con el comienzo de la Cumbre de las Américas.

Las solicitudes del estatus de refugiado y las detenciones de migrantes en México “han aumentado drásticamente” a medida que el presidente estadounidense Joe Biden “sigue restringiendo el acceso al asilo en la frontera sur”, alertó la oenegé en un informe.

Según HRW, “aquellos que cruzan la frontera sur de México huyendo de la violencia y la persecución tienen dificultades para obtener protección, se enfrentan a graves abusos y demoras”.

“A menudo se ven obligados a esperar durante meses en condiciones inhumanas cerca de la frontera sur de México mientras luchan por encontrar trabajo o vivienda”.

Para Tyler Mattiace, investigador para las Américas de Human Rights Watch, “la delegación de la aplicación migratoria estadounidense a México ha dado lugar a graves abusos y ha obligado a cientos de miles de personas a esperar en condiciones espantosas para buscar protección”.

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En 2021 México detuvo a 307.569 migrantes y 130.863 personas solicitaron el estatus de refugiado, todo un récord, según la Agencia de Refugiados de la ONU.

Biden “ha continuado con muchas de las políticas abusivas contra la inmigración” de su predecesor Donald Trump, “como presionar a México para que impida que los migrantes lleguen a Estados Unidos” y bloquear el acceso al asilo en la frontera a través de políticas como Título 42, una norma sanitaria que Biden intentó rescindir pero un juez se lo impidió, y “Quédate en México”, denunció la oenegé.

Y su homólogo mexicano Andrés Manuel López Obrador ha desplegado casi 30.000 soldados y agentes migratorio INM para detener a los inmigrantes irregulares en el país, añadió.

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos da cuenta de alrededor de 7.500 detenciones de inmigrantes no autorizados por día a lo largo del límite con México, casi cinco veces el promedio de 2014-2019.

Y miles más continúan llegando a la frontera sur de Estados Unidos: este lunes partió rumbo hacia el norte una caravana que estaba apostada en el sur de México.

Biden espera alcanzar una declaración regional sobre migración durante la Cumbre de las Américas esta semana en Los Ángeles, un tema esencial para él a pocos meses de las elecciones de medio mandato de noviembre.

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Pero los líderes de países claves para discutir la crisis migratoria, como México, Honduras y Guatemala, declinaron asistir a la cita regional.

La mayoría de los migrantes que entran por la frontera sur de México proceden de Centroamérica y el Caribe y casi la mitad de los que solicitaron asilo eran haitianos, informó Human Rights Watch, según la cual la mayor parte entra por las inmediaciones de la ciudad de Tapachula, en el estado de Chiapas.

Según entrevistas y documentación de la oenegé citadas en el informe, la mayoría afirma huir de la violencia o la persecución en sus países.

Muchos dicen escapar de las amenazas de muerte, la extorsión y el reclutamiento forzado por parte de pandillas o cárteles de la droga en Honduras, Guatemala o El Salvador, o la persecución política y los abusos generalizados contra los derechos humanos en Cuba, Nicaragua y Venezuela.

Al llegar a México temen que los agentes de la autoridad migratoria, el Instituto Nacional de Migración (INM), los deporten. Algunos aseguran que les negaron protección, les disuadieron de solicitar el estatus de refugiado o les presionaron para que aceptaran retornos voluntarios.

“Pensé que nos ayudarían cuando llegáramos a México, pero (...) nos rechazaron”, declaró un hombre que afirma huir del reclutamiento forzado de pandillas en Honduras, citado en el informe.

La autoridad de refugiados de México, la Comisión Mexicana de Atención al Refugiado (COMAR, independiente del INM) recibió en 2021 más de 130.000 solicitudes pero solo procesó 38.000.