Tegucigalpa, Honduras.- Honduras sirvió como puente para que migrantes deportados desde Estados Unidos regresen a su país de origen.
Un avión estadounidense con 177 migrantes venezolanos abordo que estaban detenidos en la Bahía de Guantánamo, en Cuba aterrizó en la base militar Enrique Soto Cano, conocida como Palmerola, Comayagua.
De acuerdo a las operaciones aéreas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), los migrantes venezolanos que llegaron a Honduras fueron recogidos por el gobierno venezolano que los devolvió a su país.
La Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, a través de un comunicado, informó antes que se confirmara el lugar de donde provenían los migrantes, sobre el traslado de unos 170 venezolanos que fueron deportados desde Estados Unidos.
“El día de hoy (jueves) se realizan acciones humanitarias del traslado de migrantes venezolanos provenientes de Estados Unidos por medio de la base militar conjunta entre Estados Unidos y Honduras, Soto Cano en Palmerola, Comayagua”, establece el comunicado.
La información indicaba que 170 venezolanos trasbordaron un avión con bandera estadounidense a un avión con bandera de Venezuela y que el proceso se realizó a eso del medio día, al finalizar el trasbordo de los migrantes al avión con matrícula venezolana, la aeronave partió con destino a Venezuela.
El canciller, Eduardo Enrique Reina, detalló a través de sus redes sociales que la acción fue un trabajo en conjunto, por instrucciones de la presidenta Xiomara Castro, en cooperación con Estados Unidos y la República de Venezuela, con quienes Honduras tiene relaciones diplomáticas.
Añadió que la labor se hizo con la participación de la Secretaría de Defensa, el asesor presidencial Manuel Zelaya Rosales, y funcionarios estadounidenses, como el enviado especial para América Latina, Mauricio Claver-Carone y el enviado presidencial Richard Grenell.
De acuerdo al medio NBC News, la administración Trump sacó en avión a todos los inmigrantes que tenía detenidos en la bahía de Guantánamo.
El medio estadounidense detalló que un alto funcionario del Departamento de Seguridad Nacional dijo que 177 de los 178 inmigrantes detenidos fueron deportados el jueves.
Mientras que la otra persona fue enviada a un centro de detención en Estados Unidos, dijo el funcionario.
La acción de sacar a todos los inmigrantes de la bahía de Guantánamo, instalaciones donde Trump aseguró que enviaría a “lo peor de lo peor” es en respuesta a una demanda, establece el medio de comunicación.
Puente de humanitario
Con esta acción Honduras se une a países como México, Guatemala, El Salvador, Costa Rica y Panamá que aceptaron servir de puente para las repatriaciones de migrantes de otras nacionalidades.
Sin embargo, el vicecanciller, Antonio García, explicó que lo que sucedió fue que Honduras sirvió como “puente humanitario” a petición de EUA y Venezuela.
“Ambos gobiernos, el de EUA y el de Venezuela, nos pidieron que fuéramos un puente humanitario, aquí se encontraban dos aviones, uno que venía desde Estados Unidos con 174 ciudadanos venezolanos deportados y un avión venezolano que los vino a recoger a Honduras” detalló.
El funcionario resaltó que fue asistencia humanitaria, que refleja las buenas relaciones que tiene Honduras con ambas naciones.
Aclaró que el trasbordo de venezolanos no se trata de un acuerdo permanente entre EUA y Honduras; aunque no descartó que se pueda volver a realizar, si el gobierno estadounidense lo solicita.
“No quiere decir que es un acuerdo permanente, simplemente fue hoy, y cualquier ocasión futura se analizará caso por caso, y si es en las mismas condiciones muy probablemente lo volvemos hacer, porque Honduras es amigo de ambos países y ayudamos a que el ciudadano vuelva a casa”, dijo.
“El caso de hoy fue un trasbordo, estilo tránsito que duró menos de dos horas”, reiteró.
Actualmente Costa Rica, Panamá, Guatemala y El Salvador aceptaron han aceptado recibir migrantes de otras naciones; mientras que el Gobierno mexicano, aunque ha aceptado vuelos con migrantes de otras nacionalidades deportados desde EUA, niega ser un Tercer País Seguro.
El coordinador del Observatorio de Migraciones de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), César Castillo, explicó que el concepto del Tercer País Seguro, consiste en que los migrantes deportados o en tránsito permanezcan en otro país mientras se resuelve su proceso migratorio en Estados Unidos.
No obstante, remarcó que lo que queda claro es la cooperación que está teniendo Honduras con Estados Unidos en el tema migratorio.
“Al hablar de que hay una asistencia humanitaria y un trabajo conjunto entre Estados Unidos, Honduras y Venezuela, para estas personas que vienen retornadas, para que puedan retornar a su país de origen hablamos que Honduras está ahora jugando un papel importante en este sentido”, apuntó.
El experto aseguró que el país no está preparado para recibir migrantes de otras nacionalidades, con las masivas deportaciones que se podrían registrar en los próximos meses.