Tegucigalpa, Honduras
La Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI) confirmó que ya tiene bajo su administración los bienes incautados la semana pasada en el noroccidente del país y que serían propiedad de la familia Valle Valle, designada como narcotraficantes por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
La incautación de los bienes comenzó el pasado 17 de diciembre y el mismo incluye tres casas de playa ubicadas en el complejo Brisas del Caribe, en Puerto Cortés.
En San Pedro Sula se incautaron dos lujosas viviendas de dos plantas ubicadas en la cuarta etapa de la colonia Trejo y un edificio donde funciona el hotel Plaza Palmero.
En los operativos de incautación participaron personal de la Fiscalía contra el Crimen Organizado, Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN), Fiscalía de Privación y agentes de unidades acreditadas a la Embajada Americana y peritos de la OABI.
Entre los bienes incautados en Trinidad de Copán se encuentran dos haciendas, un terreno, un camión y una cuatrimoto; en San Antonio se incautó un terreno. Mientras que en el sector de La Jigua se aseguraron tres terrenos, y dos comerciales en La Entrada.
La OABI, mediante un comunicado de prensa, informó que la administración de los bienes es de manera provisional, mientras se realiza el proceso judicial.
Durante el proceso judicial, los propietarios deberán comprobar ante un juez de Privación de Bienes de Origen Ilícito la legalidad de los bienes incautados, por lo que tendrá que aportar los medios de prueba de la manera en que obtuvo el dinero para adquirirlos. Según las autoridades que participaron en las incautaciones, los bienes serían propiedad de los hermanos Valle, entre ellos Miguel Arnulfo y Luis Alonso, extraditados a Estados Unidos el pasado jueves.
Millonarias propiedades
De comprobarse que los hermanos Valle son los propietarios de las lujosas propiedades, ya sumarían 69 los bienes incautados al presunto cartel familiar, que prácticamente ha sido desarticulado.
Para el próximo año se tiene previsto que se realice la extradición del menor de los hermanos, José Inocente y su esposa Griselda Amaya, quienes también son solicitados para ser juzgados por tráfico de drogas.
Mientras tanto, los 11.2 millones de dólares incautados en una caleta supuestamente de los Valle permanece depositada.
Al realizarse el proceso judicial contra los bienes de los Valle, el Estado de Honduras se agenciará varios millones de lempiras que servirán para fortalecer a las instituciones que participan en el combate al crimen organizado y el narcotráfico.