Tegucigalpa, Honduras.- “El gobierno no se va a detener con el proyecto de la Represa Multipropósitos El Tablón”, afirmó el ministro de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT), Octavio Pineda.
Los pobladores del municipio de Quimistán, en el departamento de Santa Bárbara, han expresado una firme oposición a la construcción del embalse sobre el río Chamelecón. Alegan que el proyecto inundaría miles de hectáreas actualmente utilizadas para cultivos, lo que afectaría su sustento.
Sobre esa resistencia de los habitantes de Quimistán, a la ejecución de El Tablón, Pineda, señaló: "Nosotros sabemos que va a haber oposición. ¿Qué pasa entre 1,500 viviendas o 2,000 viviendas, y más de 1.4 millones de personas que se van a beneficiar con el Tablón? Nosotros tenemos que tomar decisiones como gobierno y las vamos a tomar, y no nos vamos a detener en la represa de El Tablón".
El funcionario expuso que no quisiera pensar que son intereses políticos los que pudieran estar inmiscuidos en esa oposición a la edificación de la hidroeléctrica, "ustedes saben que estamos en un año electoral, pero este es un proyecto que lo ha anhelado la población del Valle de Sula durante mucho tiempo".
El proyecto
La actual administración de Xiomara Castro tiene contemplado que la construcción de la represa El Tablón inicie el 1 de octubre de 2025, sin embargo, debido al desacuerdo que existe con los pobladores de gran parte de Quimistán, esto no sería posible en la fecha indicada.
La realización del proyecto sería con financiamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), montó que alcanzará los 390 millones de dólares.
Desde el gobierno proyectan que la finalización de la obra sea en el segundo semestre de 2029. La finalidad sería la mitigación de desastres naturales en el Valle de Sula, tendiendo en cuenta que con cada invierno, las afectaciones son millonarias en esa región norte del país, por las inundaciones que provoca las crecidas del río Chamelecón.
Otros de los beneficios que traería, según el gobierno, sería el abastecimiento de agua para riego en el Valle de Naco, proporcionar suficiente agua potable para la zona y la generación de energía hidroeléctrica, alrededor de 13.4 megavatios.