Tegucigalpa, Honduras.- Los pacientes con esclerosis múltiple que reciben su tratamiento en los centros hospitalarios públicos a nivel nacional están en riesgo de una recaída por la falta de medicamentos.
Este martes, la Fundación Esclerosis Múltiple Amor en Honduras (Femah) denunció que en los principales hospitales del país no se encuentra su tratamiento desde hace varios meses.
Los medicamentos que no se están en el inventario de la farmacia del hospital General San Felipe, el hospital Mario Catarino Rivas y del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) son el Avonex (Interferón 1A) y Tysabri, conocido también como Natalizumab.
Desde hace varios meses los pacientes reciben un "no hay" cuando van a reclamar dicho medicamento, lo que los pone en riesgo de tener recaídas.
"En el hospital San Felipe el problema comenzó hace tres meses; en el Mario Catarino Rivas desde el mes de septiembre y justo este mes prácticamente esta semana en la farmacia del Seguro Social de San Pedro Sula, pues, reporta que ya sus inventarios son cero", indicó Juan Carlos Ortega, integrante de la Fundación.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) describe la esclerosis múltiple como una afección que se produce cuando el sistema inmunitario ataca el encéfalo y la médula espinal.
Aunque los síntomas varían de persona a persona, depende de la ubicación y la gravedad del daño en la fibra nerviosa; los más comunes son: problemas de visión, agotamiento físico y mental, dificultad para caminar y mantener el equilibrio, y entumecimiento o debilidad en brazos y piernas.
La OMS agrega que aunque no existe cura, el tratamiento puede reducir los síntomas, prevenir nuevas recaídas y mejorar la calidad de vida de quienes padecen la enfermedad.
Sin embargo, sin las medicinas necesarias, los pacientes corren el riesgo de empeorar su estado.
"La esclerosis múltiple es una enfermedad muy severa, muy dura que cuando se presentan las recaídas que le llamamos nosotros a los efectos fuertes sobre el paciente, muchas veces hay situaciones que son irreversibles, lo que ocasiona es irreversible al tiempo de dejarlo en silla de ruedas o en cama", detalló Ortega.
A nivel nacional son al menos 300 personas que padecen esa enfermedad y que han sido identificados por la Fundación; no obstante, son cerca de la mitad de esos que están en peligro al no recibir su medicamento a tiempo.
Las autoridades de los centros asistenciales del país no les dan respuesta del porqué el desabastecimiento; sin embargo, los pacientes aseguran que se debe a la mala gestión de parte de quienes se encargan de adquirir los fármacos.
"Lo que más preocupa es que se han enviado notas, hemos solicitado citas con las autoridades y no hemos recibido respuesta alguna y eso es lo que nos preocupa", señalaron los pacientes.
Exhortaron a las autoridades de Salud a que agilicen la compra de los medicamentos para así mejorar la calidad de vida de los pacientes.