Honduras

Carmilla Wyler: Los pies descalzos de la acera

<p>Un adelanto de una historia sobre un crimen atroz y los motivos ocultos en una historia siniestra en esta edición de Crímenes famosos de la revista dominical Siempre de EL HERALDO.</p>
07.04.2014

La noche era fría y oscura; la lluvia había desaparecido pero quedaba en el aire una brisa fina que helaba los huesos. Las calles estaban solitarias y solo de vez en cuando se veían las luces de algún carro a lo lejos.

La llama de las velas bailaba a merced del viento, a pesar de las botellas de plástico en que las habían metido, y apenas iluminaban las cuatro esquinas donde las habían asegurado con pedazos de concreto y piedras.

Entre las velas, sobre cartones y periódicos empapados de agua y sangre, y debajo de un toldo de plástico transparente, estaba el cadáver, tendido boca arriba, con las manos cruzadas sobre el pecho, amarradas con cordones viejos de zapatos a la altura de las muñecas y cubierto con un pedazo de tela que fue cortina en otro tiempo.

+ Lea esta impactante historia el domingo en su revista Siempre