El haber promovido un golpe de Estado en 2009 contra su presidente y el posterior “maridaje” de una de sus facciones con el Partido Nacional lo tiene en una situación difícil.
Marco Antonio Garay lideró la Alianza Liberal de Oposición que se sumó a la causa de sacar al Partido Nacional del poder y se logró el objetivo, pero su deseo era que todo su partido entrara a la alianza.
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El rechazo de las autoridades a dar tal paso le pasó factura porque mucha de su militancia prefirió darle el voto a quien más posibilidades tenía de ganar.
El analista Julio Navarro afirmó que los responsables de la crisis del histórico partido “son los gestores de alianzas que han tenido estos últimos 12 años con el partido de gobierno”. Se debe urgentemente “convocar su ideología, su historia”, sugirió el analista.
Hasta el martes, según la última actualización oficial, el Partido Liberal sacaba un poco más de 167 mil votos, equivalentes al 9.21%.
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