Nueva York, Estados Unidos.- El juicio contra el rapero Sean "Diddy" Combs acusado por tráfico sexual, secuestro y otros delitos, inició este lunes con la selección del jurado, por lo que muchos se preguntan si el proceso judicial podrá ser transmitido por televisión (TV).
El caso contra el artista estadounidense ha sido uno de los más mediáticos por las acusaciones de secuestro, tráfico sexual, conspiración con fines de extorsión, trabajo forzado y transporte para ejercer la prostitución, esto según la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York.
Este mismo revuelo también se convierte en un obstáculo para poder seleccionar al jurado del tribunal federal de Manhattan, ya que se requiere de personas imparciales que no se dejen llevar por sesgos.
A lo largo de los años, en televisión han podido ser transmitidos juicios contra celebridades, como el caso de O.J Simpson y el de Johnny Depp vs Amber Heard.
Sin embargo, estos lograron ser televisados al tratarse de juicios en tribunales estatales, a diferencia de Combs quien será juzgado en un tribunal federal, lo cual prohíbe la transmisión de su proceso judicial, de acuerdo a la regla 53 de las Reglas Federales de Procedimiento Penal de los Estados Unidos.
Esta normativa establece que "salvo disposición en contrario de una ley o de estas reglas, el tribunal no debe permitir que se tomen fotografías en la sala del tribunal durante los procedimientos judiciales, ni que se transmitan los procedimientos judiciales desde la sala del tribunal",
Es decir, ningún tipo de grabación de audio, video ni toma de imágenes será permitida en el juicio que dirigirá el juez Arun Subramanian.
Las personas podrán informarse sobre el caso a través de los distintos medios de comunicación, los cuales recopilarán los avances del proceso legal que pesa sobre el rapero de 55 años.
De acuerdo al fiscal federal Damian Williams, "Sean Combs utilizó el imperio empresarial que controlaba para abusar y explotar sexualmente a mujeres, así como para cometer otros actos de violencia y obstrucción de la justicia".
Además, la fiscalía asegura que "Diddy" lideraba una estructura criminal para facilitar el abuso y explotación de mujeres, teniendo también por objetivo cuidar su reputación.
La fiscalía también señala que en sus fiestas denominadas como "Freak-Off", caracterizadas por el descontrol sexual, uso de drogas y secretividad, abusaba de sus víctimas empleando violencia.
Asimismo, indican que Combs chanteajaba a las víctimas con exponer las grabaciones en las que estas eran abusadas sexualmente.